Por tal razón, la bancada del Partido Acción Nacional en la Cámara de Senadores exhortó a la Secretaría de Salud del Gobierno de Veracruz, a presentar un informe pormenorizado sobre las causas de la inundación del Hospital General de Perote el pasado 20 de julio.
De igual forma, pidió que tanto autoridades estatales como municipales, verifiquen que todos los hospitales y clínicas en territorio veracruzano cumplan con todos los reglamentos que ampara la Ley de Salud del Estado, con el objetivo de garantizar que se cumplen con las condiciones de seguridad idóneas.
Indicaron que en los videos se podía observar que no sólo eran unos cuantos litros los que se fugaron, sino una cantidad importante, y sobre todo que salían por las lámparas, lo cual representaba un alto riesgo.
De ahí que insistieron en que las autoridades estatales, en particular la Secretaría de Salud, debe dar un detalle pormenorizado sobre lo ocurrido en dicho nosocomio, y aplicar las sanciones correspondientes contra la empresa responsable de la obra.
Lo anterior está muy bien, de no ser porque detrás de esa ‘gran preocupación’ se ve claro que está la mano de Julen Rementería quien ya no sabe cómo hacerse notar para colarse como candidato a gobernador en el 2024.
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