Lo anterior se puede explicar con base en el crecimiento de la economía mexicana en el 2022 que fue de 3.1% la que finalmente acabó superando la meta del 3% para ese año a pesar de la epidemia del COVID-19 y la Guerra Rusia Ucrania.
En el país, de acuerdo con las cifras oficiales del PIB recién publicadas por el INEGI, las actividades secundarias que tienen que ver con la industria y la transformación que alcanzó un crecimiento de 3.3% en el año pasado superior en poco al crecimiento del ramo de los servicios que registraron un 2.8% igual que el sector primario agropecuario. Es decir, el sector secundario está jalando ya al de servicios, lo cual da fortaleza de largo plazo a la economía.
Otro factor que ha influido en el dinamismo de la economía mexicana han sido los acuerdos en controversias comerciales entre México-USA-Canadá y la fortaleza que ha mantenido el peso mexicano frente al dólar estadounidense el cual este mismo sábado alcanzó al abrir los 18.36 por dólar y ayer viernes cerró en 18.39 pesos por unidad.
Así que por decir algo, la economía nacional no gira en el mismo sentido que los discursos políticos radicalizados y polarizados, en los que todo es blanco o negro; según sus intereses y esperanzas. Afortunadamente. |