Wall Street reaccionó pésimo a los aranceles impuestos a los autos, Nasdaq cayó 2.04%, S&P 1.12%; el Dow 0.75%, el dólar 0.01%, es decir, el mapa de las Bolsas de Valores se pintó de sangre.
¿A qué le temen los dueños del dinero? Simplemente a que la inflación que ya arrancó a la alza, se vuelva incontrolable. La inflación es el peor enemigo del dinero y de las inversiones financieras.
A todo esto, Europa será quien más resentirá los obuses de Trump, puesto que los autos BMW, Mercedes y Volkswagen en Alemania; así como Toyota, Honda y Mazda en Japón, han puesto a sus economías bajo una tremenda presión depresiva.
México la libra porque los autos que exporta a los Estados Unidos tienen un 40% de partes estadounidenses.
Así, parece que Trump apretó el botón que desatará una posible tercera guerra mundial, aunque en esta ocasión no sería de misiles y bombas explosivas, sino de dinero e impuestos que podrían sumir al mundo globalizado y al comercio, en una espiral decreciente de la que pocos se podrán salvar. |