Sin embargo, por lo que se ve hasta la hora, México no está dispuesto a destapar viejas prácticas y cloacas cuando se trata de los dueños del dinero.
El tema está por demás caliente puesto que de actuar el Gobierno mexicano en concordancia con los Estados Unidos, se estarían tocando los intereses nada más y nada menos de personajes como el empresario Alfonso Romo, propietario de Vector, quien en el sexenio pasado jugó un papel sobresaliente en la Presidencia de Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, por la inmediata respuesta de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público no se ve que en México estén dispuestos a tocar esos grandes intereses económicos y por qué no decirlo, políticos.
La respuesta de México en resumen fue: “Necesitamos pruebas más contundentes”. En un comunicado, Hacienda apuntó que de contar con información contundente que pruebe actividades ilícitas se actuará con todo el peso de la ley.
Sin duda que esta será la prueba de fuego para Claudia Sheinbaum y el gobierno de la 4T. |