Y este miércoles cayó el telón. Ernestina Godoy queda como la nueva Fiscal General de la República por un lapso de 9 años, prometiendo por el Osito Bimbo que habrá autonomía, pues coordinación con el Ejecutivo “no implica subordinación”.
Lo cierto es que la búsqueda de darle Autonomía a las Fiscalías, tanto a nivel Federal como a niveles Estatales, no ha tenido buen puerto. Siguen dándose los Fiscales Carnales, siguen siendo Fiscales a modo, siguen siendo Fiscales subordinados al Ejecutivo.
Hay quienes han señalado la necesidad de que los Fiscales sean también sometidos a elección, como sucede con algunos Fiscales de los Estados Unidos… y tal vez tengan razón. Finalmente si los jueces y magistrados son elegidos por la población, por qué no elegir también a quienes se encarguen de procurar justicia.
Eso sí, nada garantiza tampoco la imparcialidad de los Fiscales si se van a votación, pues en la primera elección del Poder Judicial, la ciudadanía no quedó tan convencida.
Pero algo se puede y se debe hacer, o de plano volver a los esquemas de antes, en los que no era necesario jugar al ensarapado para escoger Fiscales “autónomos”. |