La policía dijo que a Cheyenne Hyer, de tres años, la dejaron en el coche patrulla de su madre durante cuatro horas, mientras que Barker tuvo relaciones sexuales con uno de sus supervisores en su casa al finalizar su turno.
Según las autoridades, Barker se durmió después de tener relaciones sexuales, dejando a la pequeña en el coche patrulla y aunque el aire acondicionado del auto estaba encendido, no soplaba aire frío. Cuando se encontró a Cheyenne, la policía dijo que no respondía y que tenía una temperatura de 107 grados Farenheit, lo que es más de 41 grados centígrados.
Según informes, la madre declaró que había dejado a su hija con el cinturón de seguridad puesto y el auto en marcha, pero no le dejó la ventilación adecuada.
La ex policía se declaró culpable de homicidio doloso, por lo que recibió una sentencia de 20 años de prisión.
“Quiero decir que la única persona a la que le debo una disculpa es a mi hija porque no había nadie más en su vida que yo”, expresó.
Cabe mencionar que no era la primera vez que Baker dejaba a su hija, Cheyenne Hyer, en un auto. Anteriormente, la mujer dejó a su hija en el auto para ingresar a una tienda y una de las personas que pasaban por el lugar llamó a la policía para informar el hecho. |