“Estamos como si hubiéramos pasado una guerra, como si yo hubiera estado en un continente y ella en otro. No es fácil, por un lado es refrescante pero ha sido muy largo y se pueden suscitar circunstancias que te hacen dudar, pensar”.
Afortunadamente, el vínculo que tienen es poderoso. No usan la pandemia para reencontrar un camino hacia la felicidad en solitario sino juntos, viendo hacia un futuro mejor a 45 años de haberse conocido.
“De repente ella se pone un poquito celosa por cosas que tiene en su mente pero cualquier circunstancia que nosotros tengamos siempre la resolvemos en privado”, comenta.
Hace un mes, cuando Diego compartió una imagen en Instagram junto a Galilea Montijo donde aparecían besándose como parte de un video musical, Amanda escribió varios mensajes de desaprobación. Diego comparte que a Amanda no le gustó que estuviera besando a otras personas.
“Le digo: ‘una cosa es un trabajo artístico, y otra cosa es que tienes una relación con una actriz, una modelo, que han sido muchísimas a lo largo de mi carrera pero es una relación respetuosa, vas, haces el video, te das un abrazo, un beso, que es fake, terminas y gracias".
“Fue una expresión que creo que todas las mujeres y hombres pueden comprender. Yo hace mucho tiempo en el pasado tuve algunos deslices que mi mujer conoce, entonces a lo mejor basada en esa historia se molestó y escribió algo, pero eso ya pasó”, comenta.
Diego aprendió estos siete meses que sí puede vivir sin tener mujer pero sin Amanda, dice, es imposible.
“Todo lo que hacemos nos relaciona, nuestras casas son nuestras, hago cosas pensando en ella, ha sido mi inspiración. En la mayoría de la música que he hecho está ella. Amanda es parte de mi universo y lo va a ser hasta que me muera y cuando muera va a seguir siéndolo”.
Crestomatía: Información tomada de El Universal. |