De esta manera, aprovechando el alcance e influencia del deporte más popular del país, se colocó una operación matemática en la espalda de cada jugador con el objetivo de familiarizar a los aficionados con símbolos básicos como suma, resta, multiplicación y división.
"Fútbol y matemáticas no son excluyentes", explicó Razvan Burleanu, presidente de la Federación Rumana de Fútbol, país que clasificó a la Eurocopa que se disputará en Francia entre los próximos meses de junio y julio.
"Debemos ver el deporte y la educación no sólo como elementos complementarios, sino fundamentales en la integración en la preparación y perfeccionamientos de los niños".
El 18% de la población escolar en Rumania no terminan los estudios, lo que representa uno de los peores índices de toda la Unión Europea.
"Queremos tener una generación saludable e inteligente de estudiantes", dijo el dirigente.
"A través de este proyecto, los niños aprenderán las regla básicas del fútbol y tendrán la oportunidad por primera vez en nuestro país de descubrir las matemáticas de una manera atractiva".
Por lo menos el amistoso disputado contra España el domingo en Cluj no causó ningún problema matemático al terminar sin goles.
BBC Redacción |