La evolución del modelo de empresas turísticas parten de la innovación constante. Como apunta el Presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), Pablo Azcárraga, en el documento “Una nueva hoja de ruta para el turismo mexicano”: en años recientes el escenario se ha transformado y se ha observado la obsolescencia del modelo tradicional de agencias de viajes, la aparición de las aerolíneas low cost, la transformación de los GDS en sofisticados sistemas de distribución, que tienen una enorme competencia con las nuevas OTA. Airbnb, Uber y marcas similares han puesto su propia impronta en la industria turística. Los años venideros darán testimonio de nuevos modelos de negocios y, seguramente, de la liquidación de otros que no supieron entender los cambios en los mercados”.
Estamos pues, ante la disyuntiva de modificar nuestros paternalistas sistemas de políticas públicas o movernos hacia estadios más eficientes.
Hablar de Agencias de Viaje Online que acercan a los usuarios con otros usuarios y sus experiencias de viaje, es algo natural para gran parte de los turistas. Rentar una habitación vía Airbnb ya ni siquiera es una opción exclusiva para el turismo. Programar traslados y rutas con Uber o Cabify es el pan diario en las grandes ciudades del mundo.
Veracruz, la puerta de México, una de las ciudades más importantes y más antiguas de América, conmemorará en breve los 500 años de la fundación de la Vera Cruz, y bien podríamos seguir llegando en caballo a los hoteles si esto fuera permitido.
La evolución del modelo de empresa turística ha llevado el campo de batalla a otros escenarios. Desde que el usuario hace click en redes sociales e internet se comienza la despiadada lucha por la divisa, y en medio de todo ese campo de batalla Veracruz está atorado en una trinchera de la que no ha podido avanzar ni un milímetro.
Para que un destino de viaje sea atractivo debe proporcionarle a los turistas esquemas inteligentes que optimicen los traslados y que para ellos sea homogéneo para movilizarse como si lo hiciera en su ciudad de residencia. El turista internacional está acostumbrado a utilizar Uber, Cabify o similares, pues le resulta más seguro, práctico y eficiente; es una experiencia de traslado personal global que no debe continuar retenida en Veracruz.
Xóchitl Arbesú Lago, Secretaria de Turismo de Veracruz, se ha mantenido ocupada en lo coyuntural, asistiendo a festivales, cumbres y carnavales, pero lo estructural lo ha supeditado a lo políticamente correcto. Si llegamos a la conmemoración de los 500 años de la Vera Cruz y el sistema de transporte no ha evolucionado, ¿Qué cara le vamos a ofrecer al mundo? Si Uber o sistemas similares de transporte continúan vetados en Veracruz, sería igual que mantuviéramos el trasporte del Puerto en tranvías.
Así de atrasados estamos, y la ejecución de políticas públicas de ese tipo sí son responsabilidad del Gobierno del Estado.
Vivimos no una época de cambios, estamos ante un cambio de época y el gobierno de la 4T, también debería llevarnos allá.
@AtticussLicona |