Este caso sorprendió porque paradójicamente Alemán Magnani forma parte del Consejo Asesor Empresarial del presidente López Obrador, el cual fue integrado a finales de 2018 por iniciativa del concesionario de TV Azteca y dueño de Elektra, Ricardo Salinas Pliego, quien a su vez, según declaró a principios de este año la titular del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Raquel Buenrostro, actualmente litiga con este organismo de la Secretaría de Hacienda el pago de unos 40 mil millones de pesos de sus empresas.
Sin embargo, desde febrero pasado, la Procuraduría Fiscal de la Federación ya había presentado querella ante la FGR en contra de los accionistas de Interjet luego de que el SAT emitió opinión de delito por fraude fiscal por 66 millones de pesos correspondientes a Impuesto sobre la Renta sólo respecto al ejercicio 2018.
La demanda interpuesta por la Procuraduría Fiscal, que encabeza Carlos Romero Aranda, fue presentada directamente contra el ex gobernador Alemán Velasco y su hijo, propietarios de ABC Aerolíneas, controladora de Interjet, que de 2017 hasta principios de este año acumulaba diversos pasivos por un total de 4 mil 690 millones de pesos.
Ya el columnista Darío Celis, del diario El Financiero, había publicado también que en los dos primeros años de este gobierno la familia Alemán Magnani no pudo llegar a un arreglo con la 4T, señalando que desde el inicio de la presente administración, en diciembre de 2018, se le turnó su expediente al entonces secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, quien renunciaría meses después.
“Hubieron muchas negociaciones para tratar de que subsanaran sus obligaciones fiscales; ofrecieron a la jefa del SAT desde terrenos como daciones en pago, y en especie, como cubrebocas y despensas”, detalló el columnista, apuntando que “siempre se rechazaron esas propuestas, aceptables todavía en el gobierno de Enrique Peña Nieto, cuando el SAT se daba por cobrado con inmuebles, terrenos y diversos tipos de bienes, incluidas obras de arte”.
Y a propósito del requerimiento fiscal a los Alemán, el periodista reseñó en febrero pasado que casualmente el presidente López Obrador había lanzado también un mensaje a otros empresarios que se sentían intocables y fuertes.
“No te han informado de que no han pagado”, narró en aquella ocasión el mandatario sobre un caso que, sin mencionarlo directamente, se refería a la trasnacional Walmart que en México preside Guillherme Loureiro, la cual terminó pagando cerca de 10 mil millones de pesos al SAT.
“No me está entendiendo: le estoy informando que tiene una deuda y que están en la ilegalidad y que si no resuelven este asunto fiscal tenemos la necesidad de proceder penalmente… Le estoy corriendo la cortesía de avisarle, porque estamos a punto de presentar una querella; entonces, queremos llegar a un acuerdo: mande a sus abogados y que no le engañen”, relató en febrero López Obrador.
“Pero en el caso de Interjet y los Alemán no hubo forma y la querella ya está en la cancha de los muchachos de Alejandro Gertz Manero (titular de la FGR). Y vienen más expedientes. No lo dude”, anunció desde hace cinco meses el columnista de El Financiero, quien concluía su comentario con la interrogante: “¿Se acabaron los intocables?” | 
