Es decir, en el campo de las negociaciones no caben los sentimientos de ser el más fuerte, ya que son fuerzas políticas interdependientes.
Sumado a los modos, también está el estilo. La mesa de negociaciones está inmersa en un estilo clásico, en el que las fuerzas locales luchan por tener una mayor rebanada del pastel. Pero desafortunadamente para ellos, sus sentimientos y posturas (incluso soberbios) no pasarán de ser meras anécdotas en el futuro.
Está visto que mientras en lo local no se tenga la capacidad necesaria para reconocer la interdependencia política de los tres partidos aliados, en los siguientes 15 días la estafeta será tomada por la Mesa Nacional de negociación, en la cual no se tiene solo el objetivo de ir por más espacios municipales, sino por acrecentar la fuerza de la Alianza y sostener la mayoría calificada en el Congreso de la Unión.
Y es que lo anterior nos lleva a la conclusión lógica de que los intereses estatales de los partidos que hoy caminan en Coalición, son muy diferentes a los de la 4T que sostienen bajo sus hombros AMLO, Claudia Sheinbaum, Adán Augusto López Hernández, Ricardo Monreal, Luisa María Alcalde y Andrés Manuel López Beltrán por MORENA; así como el profesor Alberto Anaya Gutiérrez del PT y para Karen Castrejón Trujillo y Manuel Velasco Coello del PVEM.
Para ellos, en Veracruz y en Durango, lo importante no es cual de los tres partidos gane la mayoría de las alcaldías en disputa, sino mantener viva la alianza y hacerla crecer en fuerza en el Poder Legislativo para que el Poder Ejecutivo consolide los cambios y la 4a Transformación se convierta en una realidad.
Es por ello que les puedo adelantar, que las luchas locales por llevar candidatos en tal o cual municipio serán estériles y no llegarán a buen puerto y que todo se definirá en la mesa de negociaciones nacional.
Allá, en la mesa nacional, al PT y al PVEM se les permitirá nombrar candidatos al menos en los municipios que gobiernan y algunos otros en los que tienen fuerza. Por ejemplo, al Partido Verde le podrían asignar los municipios de Alvarado, Orizaba, Tuxpan, San Andrés Tuxtla y Huatusco.
Hoy, el PT y el Verde saben y sienten que podrían ir solos en los 212 municipios y podría ser así, pero eso no es lo que están pensando mis fuentes en la capital del país, donde están plenamente enterados de los airados desencuentros en la mesa de negociación local y de que los sentimientos locales no son los adecuados para los intereses de la 4T.
Lo que sí hay que destacar es la enjundia, la lealtad a sus partidos, la sólida argumentación electoral y las posturas personales de cada uno de los tres dirigentes estatales: Esteban Ramírez Zepeta, de MORENA; Edgar Herrera Lendechy, del PVEM; y el colmilludo y taimado Vicente Aguilar, por el PT, quienes no han cedido un centímetro en sus posturas locales y es por ello, que en los próximos 15 días el poder central de esos partidos deberá tomar la estafeta y negociar con los objetivos superiores de la 4T y no de los intereses locales.
Así, y solo así, podrá la coalición en el poder cumplir con la meta de ganar las 200 alcaldías que se han propuesto en Veracruz.
Al tiempo, como dicen los clásicos.
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(COLUMNA "FIGURAS Y FIGURONES") | 
