La famosa teoría de tercios que tanto presumió el gobernador Javier Duarte simplemente se descompuso, y por más que insistan con la posibilidad de lograr fragmentar el voto o pulverizarlo a través de personajes como Gerardo Buganza o Juan Bueno Torio simple y llanamente no surtirá mayor efecto.
En la práctica no es lo mismo ser integrante de un partido político que lo arropa con estructura y organización, a lanzarte al ruedo como militante de las buenas intensiones, a la aventura, ahí será donde verdaderamente al menos estos dos personajes mostrarán de que están hechos, pero el augurio no es muy favorable para ninguno de los dos, muy a pesar de ser cuñados y tejer una posible alianza que termine en la dimisión a favor de alguno de parte de cualquiera de ello.
Ahora bien, que es lo que se viene en el escenario político electoral de Veracruz, al menos las izquierdas desarticuladas en su conjunto verán como el boquete provocado en primera instancia por el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) simplemente no lo llenarán, ni pasándose al PAN, pues es quizás el instituto político a vencer.
En el otro caso, Movimiento Ciudadano (MC) el de Dante Alfonso Delgado Ranauro, pretende salir en solitario para cuando menos demostrar de que está formado conciencia, cosa que no representará mucho, pero que algo dejará a su favor.
Que sucederá con quienes confiaron en el proyecto político del PRD y hoy se dicen defraudados tras la aprobación de la Alianza, muy probablemente se irán a otro proyecto a fin, en el horizonte se avizora la oferta política del Partido del Trabajo (PT) que seguramente brindará refugio a un fuerte volumen de perredistas que seguramente abandonaran la nave, pues por mucho no comulgan ni con el proyecto panista y mucho menos con su posible candidato
Seguramente personajes como Francisco Valencia provocaran un verdadero hueco al PRD, que con la nominación del PT, que se rumora pudiera acogerlo, arrebatará gran cantidad de votos al partido del Sol Azteca, contrarrestando la cargada tanto oficial, como la no oficial.
El tufillo que deja la victoria pírrica anunciada por Agustín Basave esboza que las carretadas de billetes fueron abrumadoras para echar atrás lo que llevo días negándose, aunado a ello, los perredistas olvidan por desgracia, que quien reprime una vez, reprime dos veces, y la persecución Chirinista contra militantes de ese instituto político fue tal, que aún se recuerda la manifestación de travestís operada y enviada por el entonces responsable de la política interior de Veracruz, hoy convertido ya en paladín de la justicia y la pureza.
Cierto es que Miguel Ángel Yunes Linares como buena ave de tempestades provocará dos sentimientos, uno de afinidad, el otro complemente contrario, en donde el rechazo y el encono dividirá más a los veracruzanos.
Al tiempo.
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