Cuando los que deberían estar encadenados y en una cárcel de máxima seguridad gozan de cabal libertad, 53 inspectores de ganadería se atan y encadenan de manos y pies en la puerta de la oficina de Ramón Ferrari Pardiño. Les debe 8 meses de salarios, más 3 millones y medio de pesos. “Ferrari y el subsecretario de Ingresos de SEFIPLAN Arturo Jaramillo, nos prometen y firman acuerdos, pero no nos pagan, dijo Acdmer Antonio Galicia Campos coordinador estatal de Inspectores de Ganadería. Desde luego, Ramón no atiende a los quejosos... |