Refirió que la falta de convivencia entre las familias está causando que haya carencia de valores y la educación muchas veces se deja en manos de los profesores.
"No se atiende a los niños, yo siento que los valores tenemos que reforzarlos, hay que luchar por ellos y una forma de hacerlo es en el salón de clases porque empezamos a ser permisivos, entonces si el niño está falto de atención y cariño en su casa, no tiene acercamiento con la figura paterna, que a veces ni la figura paterna está presente, se propicia la agresividad a todos los niveles pero no nada más física, verbal y sexual".
Agregó que es a los padres a quienes les compete poner reglas y hacer que se cumplan.
"Si en la escuela se hace un esfuerzo porque el niño tome ciertas directivas sociales, si los axiomas no están fundamentados y hay permisividad en vez de darles actividades sanas, no se podrá regresar a la raíz de los valores". |