Esa es la estrategia de trabajo que ha implementado el DIF estatal y voluntariados de las dependencias de gobierno a lo largo de la administración, con el programa Adiós a la Pobreza que desde su inicio detectó las necesidades más apremiantes de las familias de las localidades con mayores regazos sociales, pues sólo con cambios y programas específicos se podía lograr una transformación importante en su calidad de vida.
“Hasta el último día de la administración se estará trabajando para atender las necesidades de los veracruzanos,”, expresó el director de Atención a Población Vulnerable del DIF estatal, Julián Rubín Sandoval, quien se reunió con beneficiarios del programa en este municipio, apoyado por el Voluntariado de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), para explicar en qué consisten los apoyos que reciben las comunidades.
Asimismo, las autoridades municipales se sumaron y reconocieron el trabajo del gobierno estatal durante la administración para beneficiar a todos los grupos de la población: a la niñez y adolescencia con juguetes, juegos tubulares, canchas deportivas y el gimnasio al aire libre; a las mujeres con proyectos productivos que impulsaron sus sueños y deseos de salir adelante, y las personas con discapacidad y adultas mayores con la unidad de transporte adaptado, uno de los beneficios más importantes para eliminar barreras para su inclusión social.
“Con el programa Adiós a la Pobreza se dotó recientemente de láminas para 236 familias y en esta ocasión con baños y estufas ahorradoras, que son apoyos justos y equitativos”, dijo el presidente municipal, Bernardino Bocarando Sánchez.
La coordinación de todos los niveles de gobierno e instituciones ha sido parte fundamental para la ejecución de los programas en este municipio y en el desarrollo de las actividades del DIF estatal. |