La investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Luisa Paré dijo que ante el desinterés de los jóvenes por el campo y de manera particular de la siembra de maíz, ésta podría ser la última generación de campesinos en muchas zonas del estado. En entrevista refirió que lo anterior obedece a la falta de apoyos a sector agrícola que está dando como consecuencia que éste ya no sea sustentable. Esa situación resulta lamentable, dijo, considerando que el maíz no sólo es alimento, sino que es cultura, identidad, pero además territorio. "Porque habría que agregar en estos tiempos de mucha codicia sobre las tierras de los campesinos, codicia de parte de muchos intereses comerciales, de grandes corporaciones en todo el país, principalmente en los territorios indígenas, que el maíz es territorio". Y es que dijo, desde generaciones atrás, se ha ocupado un territorio donde el maíz y la milpa han sido el elemento central para transmitir la identidad y cultura. "Que desgraciadamente quizá estemos hablando de la última generación de campesinos dado que no hay apoyo para el campo y dado que los jóvenes le dan mucho la espalda al campo y hay que encontrar la manera de tener un campo digno del cual se puedan mantener las siguientes generaciones", abundó. Refirió que en este momento el maíz y la milpa constituyen un elemento fuerte en la defensa del campo, porque insistió, representa la identidad de un pueblo. "La mejor manera para que los jóvenes puedan quedarse aquí es que haya un fomento al campo y no cualquier agricultura que nos llena de agroquímicos y nos están envenando los suelos, justamente porque al campesino no le dejan más oportunidad que rentar su tierra que le da algo que deberían estarle concediendo las autoridades que deben ocuparse del fomento agropecuario", criticó. |