El Universal había sacado hoy una nota muy temprano relativo a la complejidad del Magistrado Alfonso Guevara, quien era el encargado de ver el caso de Diego Cruz quien solicitaba no ser extraditado a México y seguir su proceso en España, pues alegaba que aquí, el tema estaba politizado y que había sido víctima de extorsión y amenazas. Alfonso Guevara, apuntaba el artículo, tenía fama de ser implacable y muy rigorista. Bueno, pues Guevara cumplió con su fama de juez rápido, anticipándose mucho a los plazos previstos con su resolución. Se pensaba que la misma podría llevar hasta dos semanas, pero apenas dos días después de la audiencia en la que Diego Cruz hasta lloró, los magistrados rechazan los argumentos de la defensa y consideran “que se dan los requisitos para acceder a la entrega, y que el delito cuya persecución se solicita la entrega es de naturaleza común, no se advierte motivación espuria en la demanda, no concurre el instituto de la prescripción dada la fecha de los hechos y no cabe apreciar circunstancias extintivas de la responsabilidad penal, siendo incuestionable la jurisdicción de México atendido el principio de territorialidad". Los jueces consideran que el caso entra plenamente en los condicionantes previstos por el tratado de extradición entre España y México, por lo que Diego Cruz será extradita para que termine su proceso y se apegue a los mandatos judiciales mexicanos. Aún le queda lo que en España se conoce como auto ante el Pleno de la Sala Penal de la Audiencia Nacional, pero según confirman medios como el propio Universal, las probabilidades son escasas… la justicia a veces demora, pero a todos les llega. |