Tarde reaccionó Ricardo García Guzmán, lo hizo cuando el Estado ya está hecho añicos financieramente y en el fondo económicamente. Ahora, al cuarto para las doce, a los paladines de la justicia se les ocurrió medio cumplir con sus obligaciones de Contralor y Fiscalizador. García Guzmán y Antonio Portilla tendrán en algún momento que enfrentar también a la justicia por sus omisiones, pero mientras, se quieren llevar entre las patas a otros. Esta semana Ricardo interpondrá ocho denuncias contra ocho ex funcionarios (además de las ya puestas contra Deantes y Bermúdez, ex titulares del Trabajo y de Seguridad, respectivamente). Trasciende que entre las ocho denuncias estarán unas nuevas a Mauricio Audirac y a Juan Manuel del Castillo, exfuncionarios de Finanzas. No se ve claro qué le puedan denunciar a Audirac, y mucho menos qué le puedan comprobar, pues de las anteriores denuncias ya tiene prácticamente solventado todo. Continúa esta guerra personal García-Audirac. Las denuncias a Deantes y Bermúdez sonaron a balas de salva… ojalá el Contralor no esté aplicando: calumnia que algo queda. |