Una vuelta por el escenario para despedirse y dar gracias, una repetición de alguno de sus grandes éxitos... Así suelen terminar muchos de los grandes conciertos del verano para regocijo de los seguidores. Algo que no ocurrió en el caso del show que dio Enrique Iglesias ayer en Santander, en el único que ofrecía en su gira en España.
La sesión tuvo una duración de apenas una hora y media y acabo sin los habituales besos o una despedida. Por lo que ese sabor agridulce se tradujo finalmente en una sesión de abucheos de los fans allí congregados, que no dudaron en gritar: «Manos arriba, esto es un atraco».
Los asistentes a los campos del sport de El Sardinero se mostraron muy decepcionados y no dudaron en trasladar ese sentimiento a las redes sociales.
Medios naionales e internacionales no dudaron en recoger lo ocurrido, incluida la espera en la programación del Año Jubilar Lebaniego de media hora, que además duró menos de lo esperado.
El artista participó en la cita dentro de su gira «Sex and Love Tour» y de momento la de ayer es la única programada en Europa en todo el verano y el otoño, según el calendario de actuaciones anunciadas en la web oficial del cantante.
El artista permaneció ajeno a toda la polémica y no dudó en colgar en las redes sociales algunos momentos del concierto.
La Voz de Galicia |