Otros comentan que con ese formato se evitará la bufalada de buscachambas… y pueden tener razón.
Sin embargo, corre el riesgo de tener la frialdad del Internet, y podría faltarle el calor de los eventos, el cariño profesado por sus seguidores, los abrazos, los sudores atepachados, las pasarelas, las poses y aplausos.
¿Qué pruebas del ácido deberá pasar Pepe? La primera, que lo sintonicen miles de personas, y no solo un par de cientos como últimamente sucede con las transmisiones de Yunes Linares; la segunda, que su mensaje permee y quede en la mente y corazón; y la tercera, que ocupe esta oportunidad para dialogar y no sólo para transmitir.
Xóchitl Gálvez dio su informe en 2016 por redes sociales, y fue un éxito porque respondió preguntas de los usuarios. Hubo diálogo.
¿Pasará Pepe la prueba del ácido? Ya lo veremos. |