La revista Time causó revuelo este jueves al presentar la portada de su próximo número, que incluye un fotomontaje donde se funden los rostros de los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, y de la Federación Rusa, Vladimir Putin.
Esto, luego de la cumbre bilateral que sostuvieron ambos mandatarios en la ciudad finlandesa de Helsinki, en la que Trump dejó ver que confiaba más en su contraparte rusa que en sus propias fuentes de inteligencia.
En una conferencia de prensa que causó gran polémica en la Unión Americana, el republicano se refirió a la investigación de la CIA por la posible intromisión rusa en la elección que lo llevó a la Casa Blanca, y declaró:
"Mi gente se acercó (…) y dijeron que creen que es Rusia. Tengo (aquí) al Presidente Putin y me acaba de decir que no es Rusia. Voy a decir esto: no veo ninguna razón por la que podría serlo”.
Esta aseveración causó una oleada de críticas en su país, al grado que varias figuras públicas y analistas acusaron a Trump de traición. Debido al escándalo, el presidente intentó calmar los ánimos declarando que en realidad quiso decir “no veo ninguna razón por la que (Rusia) no podría serlo”. |
