Y por el otro, saldaría una deuda con quien relevaría a Verónica Aguilera, y le estaría cumpliendo por fin a quien siempre quiso el DIF, la diputada local Ana Miriam Ferráez Centeno.
El cambio, se dice, podría darse algunas semanas después de las comparecencias, pero como éstas se alargaron casi hasta mediados de diciembre, en una de esas Verónica Aguilera todavía cobra el aguinaldo completo y su movimiento se dé hasta principios del próximo año.
Eso es lo que han escuchado los sabios bebedores de café y sólo los que hacen la política podrán confirmarlo con sus hechos.
Lo que sí es un dato duro, es que Aguilera Tapia no ha sabido sacarle jugo a esa dependencia que por tradición ha sido el escaparate perfecto para lucir y hacer lucir al Gobernador.
Y pues quién mejor que Vero para ganarse los canillazos del año.
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