El dirigente priista, con el rabo entre las piernas, repudiado por sus pares en la cúpula del poder de su partido, volvió a los medios a exponer su ‘borrón y cuenta nueva’ como si ello fuera tan fácil. Lo primero que debió hacer es ver hacia el interior de su partido, de convencer a quiénes ya le han retirado su confianza para seguir al frente del CEN y lo han marginado de las negociaciones con la coalición.
Pero no, ‘Alito’ recurre de nuevo, y con la cabeza gacha, a la súplica, a ponerse de rodillas y alardear que ‘solos ningún partido podrá ganar una elección’.
‘Alito’ siente pasos en la azotea, no le salió su jugada, se siente solo, la Comisión legislativa para su desafuero está en marcha y hoy suplica y busca apoyo para su causa política perdida y las cuentas pendientes que dejó en Campeche. Suplica "Yo no tengo nada que esconder, me asiste la razón, lo demás es el efecto corruptor, el efecto de querer hacer un linchamiento político y mediático, mediante montajes, mentiras y calumnias para ponernos ante la opinión pública como culpables, que somos lo peor, atacar y denigrar al partido, a mi persona y a mi familia”.
¿No que muy gallito cuando salió a decir antes de sus desafortunadas andanzas legislativas que ‘Si nos tocan a uno nos tocan a todos’? Pues se da el caso que él los tocó a todos y ahora quiere enmendar caminos.
Habrá que esperar las reacciones de Marko Cortés y de Jesús Zambrano que de no aceptar los lloriqueos de ‘Alito’ le pondrán el último clavo a su ataúd y lo dejarán listo para su desafuero y encarcelamiento, pues los priistas verán en ello, y de esa manera la única forma de sacarlo del Partido al que tanto daño le ha hecho.
Pobre ‘Alito’.
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