La terrible inflación disminuyó considerablemente el poder adquisitivo de los mexicanos, quienes en el 2022 soportaron el pico de una inflación anualizada del 8.7% en la segunda quincena de agosto, sin que -obviamente- los sueldos tuvieran un incremento paralelo.
Aún así, hay quienes ven con optimismo la racha a la baja de la inflación anualizada, la cual lleva seis quincenas consecutivas a la baja, según datos del INEGI.
Lo más complicado de esto, para el público en general, es entender por qué se puede hablar de una disminución en la inflación, si los precios siguen subiendo, sobre todo en el rubro de los alimentos.
Y es que en dicho concepto la inflación promedio anual es del 10.13%, lo que mantiene una fuerte presión entre las familias de más bajos ingresos que, incluso con el apoyo de los programas oficiales, están pasando duros momentos de crisis económica.
¿En dónde está golpeando más la inflación? Principalmente en precios de la tortilla o el huevo, que son alimentos indispensables en la dieta del mexicano. Así, la tortilla en la primera quincena de abril tuvo un aumento del 12.78%, mientras que el huevo subió el 26.60% en promedio.
Pero no solo esos dos productos, otros como la naranja (50.69%); el pan de caja (18.63%) o el azúcar (10.78%), también están por las nubes.
¿Qué es lo que está bajando? Principalmente el precio de las materias primas y servicios logísticos.
Por otra parte, el nivel de inflación actual permite considerar que se está llegando a la tasa terminal de referencia (11.25%), lo anterior según el subgobernador del Banco de México, Jonathan Heath. “No estoy afirmando que la tasa terminal es 11.25 por ciento. Dije que aumentó significativamente la probabilidad de que lo sea. ¿Cómo interpretar este dato? Nos estamos acercando cada vez más a que efectivamente sea 11.25%, pero todavía falta ver cómo se desenvuelve la información que se va ir dando de aquí hasta el 18 de mayo. Justamente, falta el dato de inflación de abril y deberíamos tener una mejor idea de cómo viene la inflación de la primera quincena de mayo”.
Aún falta mucho para que la inflación baje a los porcentajes buscados (3% + / - un punto porcentual)… pero cuando menos, el que no continúe subiendo, ya es un respiro. |