MIENTRAS Samuel García, Gobernador de Nuevo León y Luis Donaldo Colosio, alcalde de la ciudad de Monterrey, parecen deslindarse de Movimiento Ciudadano, al no aceptar que los sigan manipulando como posibles candidatos de este partido político con rumbo a la sucesión presidencial, el propio presidente de la república Andrés Manuel López Obrador, le dicta la agenda pública a Dante Delgado Rannauro, para que se decida por cualquiera de estos personajes y participe directamente en el proceso electoral del dos mil veinticuatro.
Dante parece estar entre la espada y la pared, luego de que poco a poco lo han ido arrinconando para que tome una determinación dentro de los tiempos políticos, porque si bien ha dicho que no se sumará a la coalición de partidos políticos que integran el bloque opositor, también es cierto que mucho le han recomendado que su mejor opción será estar unido con el PRI, PAN y PRD, porque de otra manera solo se expondrá a quedar en el sótano de los resultados electorales del año que viene.
Dante no tiene preparado a un personaje con perfil adecuado, salvo que en verdad quiera ser él quien represente a Movimiento Ciudadano en este proceso electoral que se acerca, tal y como ya lo dejó señalado en una reciente entrevista de televisión y eso quiere decir que en el caso de no tener a alguien que le garantice un buen papel político en la contienda, se apuntará directamente para estar en condiciones de participar.
|
Pero hay muchas otras circunstancias que analizar en este caso, porque el presidente le ha puesto los dos nombres que parecen ser mejores que cualquier otro aspirante, pero que bien sabe el mismo mandatario que solo le servirían para dividir la votación y tener en Morena la oportunidad de ganar con los pocos votos que les queden. El propósito del presidente en este momento es seguir dividiendo a los partidos políticos para que no sean una verdadera oposición en las elecciones presidenciales, luego de que ya se dio cuenta que su partido no tiene muchas posibilidades de obtener la victoria electoral.
Para Dante es una disyuntiva que deberá resolver cuanto antes, es decir, ir solo en la contienda con cualquiera de sus aspirantes o bien sumarse a la coalición donde podría irle mejor al considerársele en la próxima integración del gabinete en el caso de que la coalición llegara a ganar la presidencia de la república.
(DE LA COLUMNA "LÍNEA POLÍTICA")
Si quiere leer la columna completa, dé click aquí. |
