En los accidentes en motocicleta, 8 de cada 10 pacientes accidentados presentan traumatismo craneoencefálico, lo que se traduce en 80% de este tipo de lesiones graves.
El uso de casco al conducir motocicleta protege la cabeza, el cerebro y el rostro, lo que previene el contacto directo con cualquier objeto que pudiera afectar el cráneo y con ello absorber el impacto.
El médico Bautista Crescencio agregó “es importante concientizar a la población, que el uso de casco se encuentra estipulado y reglamentado, y se debe de evitar manejar a exceso de velocidad como con precaución: para el área médica, una velocidad superior a los 32 kilómetros por hora se considera de alta energía y con ello el daño por accidente son elevados”.
Su uso se asocia a un menor tiempo de hospitalización, menores costos económicos en salud; menor severidad de lesiones; disminución de mortalidad y disminución de daños faciales ya sean temporales o permanentes.
Asimismo, se recomienda no transportarse más de dos personas por motocicleta, ni menores de edad para evitar accidentes mayores. |