Y es que en los cafés lo dan por hecho debido más que nada a lo que han asentado en sus columnas algunos de los columnistas más leídos en Veracruz y que por si lo preguntan, los que más primicias han lanzado al aire en los últimos meses, como Ricardo Chúa, quien comenta el movimiento en su columna de hoy (que puede leer aquí) y también lo afirma Luis Ramírez Baqueiro aquí: https://politicaaldia.com/movil/vercolumna.php?id=117689.
Así que a reserva de que se cumplan los adelantos de las columnas en la mesa, ya se apuntan los pros y contras del nombramiento de Cuitláhuac.
Lo cierto es que, de darse el movimiento con Claudia Sheinbaum, en la última década la CFE habrá tenido a dos xalapeños al mando, primero fue el joven economista Jaime Francisco Hernández Martínez, maestro y doctor en Gobierno con especialidad en Economía Política, quien ejerció el cargo durante el sexenio de Enrique Peña Nieto… y el segundo sería Cuitláhuac García Jiménez.
Que sí Cuitláhuac merece el cargo, obvió es que para sus detractores en Veracruz, no. Pero habrá que decir que se debe valorar que el Estado estaba hecho pedazos en sus finanzas y lo enderezó; que el turismo en el sexenio ha llegado a sitios inalcanzables en anteriores gobiernos; que logró equilibrar las inversiones en todas las regiones de Veracruz; que logró revertir la percepción y la inercia de inseguridad que dejaron en Veracruz los gobiernos de Fidel Herrera Beltrán, Javier Duarte de Ochoa y Miguel Ángel Yunes; que casos de corrupción se han enumerado, pero no comprobado; y sobre todo, que Morena conservó el poder y lo acrecentó en lo Legislativo.
¿Que dejará pendientes? Claro que los habrá, pero habría que tomar en cuenta que a Cuitláhuac le tocó gobernar en uno, por no decir el primer verdadero periodo de transición política después de casi 100 años de gobiernos del PRI y una colita del PAN.
Así que, si lo merece o no, quedará en su criterio y sus pasiones políticas, pero de concretarse las versiones de café, Cuitláhuac cumple con el perfil y como cualquier mexicano se merece la oportunidad y el beneficio de la duda. Es lo que en conclusión se pudo sacar de lo que platicaron esta mañana los sabios bebedores de café.
Los canillazos son desde luego para aquellos que al opositor político todo se le regatea, mientras siguen aplaudiendo las aberraciones políticas que han cometido sus héroes en el gobierno. |