Rocío Nahle no sólo cambió (como prometió) el discurso del ejecutivo estatal hacia afuera (cosa que propios y extraños agradecimos), sino que rasuró a varios “cuitlahuistas” que añoraban con quedarse seis años más, bajo una bandera de austeridad que sólo usaron de “dientes para afuera”.
Sheinbaum y Nahle tienen modos similares para conducirse, de ahí que la presidenta en repetidas ocasiones se haya referido a Nahle (en la mañaneras o fuera de ellas) de manera positiva, más allá de que sea su amiga personal. “Política de altura”, dijo la hoy gobernadora de Veracruz, después de lo “vara tan baja” que heredó de García Jiménez.
En una junta que sostuvo la presidenta con su cuerpo cercano de asesores, hace algunos días en Palacio Nacional, pidió efectuar un análisis que midiera el desempeño político de las y los mandatarios morenistas (y aliados) en estados de la República… en el afán, por supuesto, de evitar accidentes como los de Cuitláhuac García, por mencionar un ejemplo.
Contra la agresividad de Trump…
Me hacen saber que la oficina para responder (con conocimiento, agresividad y creatividad) a cada uno de los ataques de Trump, y que compartí en este mismo espacio la semana pasada, funciona bien y a marchas forzadas ante la inminente toma de protesta el próximo día 20.
El despacho lo comandan, desde sus trincheras, tanto Marcelo Ebrard como Juan Ramón de la Fuente. Se viene mucho trabajo en las semanas que se avecinan.
Veremos qué ocurre.
X: @aaguirre_g
(COLUMNA "AL RESPECTO") |