Aquella jauja poco a poco se fue esfumando.
De puntito en puntito, Banxico fue recortando la tasa de interés de los Cetes y de pronto dejaron de ser un buen negocio.
Ahora, la tasa de los Cetes a 28 días está a 7.75%, pero luego de que FED bajó sus tasas en los Estados Unidos, en México también se frotan las manos para hacer lo mismo. Gabriel Cuadra, subgobernador del banco central ya comentó que el recorte de la FED “dará margen para disminuir la tasa en México”, con lo que no sería raro terminar el año con un par de puntos menos en la tasa de los Cetes.
Por su parte, el SAT le quiere poner una mayor mordida al ISR derivado de los rendimientos de los CETES y casi duplicar ese ingreso. La propuesta en el Proyecto de Presupuesto 2026 es subir la retención del 0.5% al 0.9%. Esto quiere decir que en lugar de 5, podría retener hasta 9 pesos por cada 1,000 pesos de rendimientos, con lo que si Usted es de los que ahorra en Cetes, pero no hace su declaración anual, no recuperará 9 de cada 1,000 pesos de sus rendimientos.
¿Qué le queda el mexicano para invertir? Salvo que se meta a la compra de fondos de inversión diversificados en una cartera de alto, medio y bajo riesgo, se tendrá que resignar a ganar cada vez menos por sus Cetes, y si a ese 7.75% actual que da de rendimiento se le resta la inflación y la retención del ISR, ¿Cuánto queda?
Ya ni siquiera las Sofipos que daban rendimientos fantásticos arriba del 15% siguen vigentes, salvo aquellas que significan alto riesgo y en donde los ahorradores serios no están dispuestos a invertir gran parte de su patrimonio.
Los Cetes están en jaque. No solo seguirán bajando, sino que Hacienda va por una mayor tajada del pastel.
Lo único bueno del panorama es que los créditos se abaratan, y si tiene usted pensado solicitar un crédito, tal vez le convenga esperar un poquito para amarrar una mejor tasa. |