Lo peor es que hay quienes comparten todo tipo de contenidos sin verificar su autenticidad ni realidad con tal de ganarse un like como si fueran chistes.
La humanidad entera va perdiendo respeto por si misma.
La información es poder, un pueblo bien informado decide mejor, por consecuencia la desinformación o mejor dicho desinformar es vergonzoso.
En otros países el tema ya es enfrentado con rigor, por ejemplo, en China están por exigir títulos oficiales a influencers que hablen de medicina, leyes o finanzas, porque viral no siempre es sinónimo de verdad.
Y, Character.ai prohibirá a menores de 18 años chatear con sus bots desde el 25 de noviembre de este mismo año.
Y México ¿cuándo y cómo?
Pero lo lamentable es que los legisladores o los poderes ejecutivos mexicanos, del partido que sea no se atreven a iniciar leyes que regulen los abusos con tal de no perder votos. Una cosa es la libertad de expresión y otra el abuso, el engaño, la ofensa, humillación, remedios, curas milagrosas y el maltrato a personas o animales solo para hacer reír y ganarse un like.
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