.- La campaña de Tomás Carrillo Sánchez, el “negrito” preferido de Fidel y Duarte, sufre y no por el calorón de la tierra de Carpio y Fentanes, sino por el olor a azufre que deja en Palacio su compañera de partido Adriana Maass.
Todo lo malo, todo lo puerco, toda la animadversión que Adriana ha sabido cultivar en su contr... |