Hasta el 14 de septiembre la Secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez Álvarez, reportó un regreso paulatino a clases presenciales de más de 13 millones de educandos; esto es menos de la mitad del total entre alumnos cuyas edades fluctúan de los 3 a los 29 años.
Acudir a clases presenciales representa asimismo un apego a la Ley.
Veamos:
“El 16 de marzo de 2020, la Secretaría de Educación Pública publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el Acuerdo 02/03/20 por el que se suspenden las clases en las escuelas de educación preescolar, primaria, secundaria, normal y demás para la formación de maestros de educación básica del Sistema Educativo Nacional, así como aquellas de los tipos medio superior y superior dependientes de la Secretaría de Educación Pública, a excepción del Instituto Politécnico Nacional, el cual fue una medida preventiva y sancionada por el Consejo de Salubridad General, que a su vez fue modificado por el diverso número 06/03/20 publicado en el DOF el 1 de abril de 2020, por el periodo comprendido del 23 de marzo al 30 de abril de 2020, como una medida preventiva para disminuir el impacto de propagación de la SARS-CoV2 en el territorio nacional y, posteriormente, mediante el Acuerdo 09/04/20 publicado en el DOF el 30 de abril de 2020, para ampliar por tercera y última ocasión la suspensión hasta el 30 de mayo y, de manera extraordinaria, el 18 de mayo, en aquellos municipios de nula o baja transmisión del virus SARS-CoV2…”
Bajo estas medidas legales y cautelares el gobierno federal colocó al sector educativo frente a la Pandemia del COVID.
El coronavirus y sus diversas variantes han cobrado hasta la fecha 275 mil 450 fallecimientos en territorio nacional.
La última actualización del sector salud -al 27 de septiembre del 2021- establece un total de 3 millones 632 mil 800 contagios a partir de marzo del 2020 y 2 millones 98 mil 457 personas pacientes recuperados.
Información publicada por el sitio periodístico EXPANSIÓNpolítica, revela en una nota firmada por la reportera Ariadna Ortega:
“La carrera de México para la adquisición de vacunas contra el COVID-19 le ha permitido contar con un stock de nueve vacunas aprobadas desde el 11 de diciembre de 2020, con el de Pfizer como el primer fármaco avalado para uso de emergencia.
De las nueve aprobadas, el país ya tiene disponibles para aplicar siete, mientras que solo tiene contrato con cinco farmacéuticas. Esto da un total de 243 millones 930,000 vacunas, incluyendo las que se conseguirán bajo el mecanismo COVAX y los 2 millones de dosis que se consiguieron de AstraZeneca a través del Instituto Serum de India.
Farmacéuticas con las que México tiene contratos:
AstraZeneca: 77.4 millones para 38.7 millones de personas.
Pfizer: 34.4 millones para 17.2 millones de personas.
CanSino: 35 millones para la misma cantidad de personas.
Sputnik V: 24 millones para 12 millones de personas.
Sinovac: 20 millones para 10 millones de personas.
Aunado a ello, se adquirieron 51.1 millones a través del mecanismo COVAX de la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el que se busca garantizar un acceso equitativo a las vacunas, y las de AstraZeneca con India.
Entonces, ¿cómo México aplica otras vacunas?
Si bien solo firmó contratos con esas cinco farmacéuticas, México ha tenido acceso también a las vacunas de Janssen y de Moderna, gracias a acuerdos a los que ha llegado con Estados Unidos, que ha donado 4 millones 850,000 dosis, mismas que se han aplicado en la frontera con ese país con la intención que se abra el tránsito.
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Hasta el momento, han arribado 114 millones 47,815 dosis de las siete vacunas disponibles y se ha vacunado a 63 millones 125,382 personas, de las cuales 69% cuenta con el esquema completo de inmunización (43 millones 820,430).
De las vacunas contratadas, Sinovac ya cumplió con las 20 millones pactadas, mientras que Pfizer está próxima a cumplir con sus 34.4 millones de dosis, ya que lleva entregados 32.4 millones; restan solo 2 millones.
En tanto, AstraZeneca lleva 43.4 millones en total de los 77.4 millones contratados y los que se enviaron a través de COVAX; de Sputnik se han enviado 6 millones de los 24 millones de dosis que se contrataron, en tanto que se cuenta con 7 millones 295,410 unidosis de CanSino de los 35 millones que se adquirieron. (1)
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El 28 de agosto pasado, el Diario Oficial de la Federación publicó el siguiente comunicado de la Secretaría de Educación Pública (SEP)
“ACUERDO NÚMERO 23/08/21 POR EL QUE SE ESTABLECEN DIVERSAS DISPOSICIONES PARA EL DESARROLLO DEL CICLO ESCOLAR 2021-2022 Y REANUDAR LAS ACTIVIDADES DEL SERVICIO PÚBLICO EDUCATIVO DE FORMA PRESENCIAL, RESPONSABLE Y ORDENADA, Y DAR CUMPLIMIENTO A LOS PLANES Y PROGRAMAS DE ESTUDIO DE EDUCACIÓN BÁSICA (PREESCOLAR, PRIMARIA Y SECUNDARIA), NORMAL Y DEMÁS PARA LA FORMACIÓN DE MAESTROS DE EDUCACIÓN BÁSICA APLICABLES A TODA LA REPÚBLICA, AL IGUAL QUE AQUELLOS PLANES Y PROGRAMAS DE ESTUDIO DE LOS TIPOS MEDIO SUPERIOR Y SUPERIOR QUE LA SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA HAYA EMITIDO, ASÍ COMO AQUELLOS PARTICULARES CON AUTORIZACIÓN O RECONOCIMIENTO DE VALIDEZ OFICIAL DE ESTUDIOS, EN BENEFICIO DE LAS Y LOS EDUCANDOS.”
La disposición general 2 del Título 1 de este acuerdo, establece:
SEGUNDO.- El servicio público educativo se brindará de forma presencial, responsable y ordenada en los términos que dispongan las Autoridades Sanitarias.
Por lo que hace a la educación preescolar, primaria, secundaria, Normal y demás para la formación de maestros de educación básica, las Autoridades Escolares, docentes y el personal de apoyo y asistencia a la educación, deberán asistir al plantel que les corresponda, conforme a lo establecido en el ACUERDO 15/06/21. En lo que se refiere a los tipos medio superior y superior se estará a lo dispuesto por los calendarios escolares correspondientes.
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Lo anterior es una disposición legal, la orden de un Patrón -El Estado- a empleados -Maestros, auxiliares, funcionarios del sector educativo nacional y sus pares estatales.
No es el caso de los educandos -alumnos de todos los niveles- ni de los padres de familia bajo cuya responsabilidad se ubican éstos.
En la práctica, el cumplimiento del acuerdo 23-08-21 de la SEP requiere de consensos o se vuelve imposible de aplicar.
También -se lee con toda claridad- el sector salud determina las condiciones para el regreso a clases presenciales o la suspensión del mismo.
El reportero ha dialogado con maestros en el sur de Veracruz.
Va un ejemplo: en la Escuela Secundaria Técnica 140 de Acayucan se presentaron a clases presenciales 296 alumnos este lunes 27 de septiembre.
Allí, hay una matrícula de 414 educandos; es decir más de 70 por ciento del alumnado decidió acudir a tomar clases presenciales por voluntad propia y con el visto bueno de sus padres de familia.
¿Por qué tomaron la decisión de volver a clases presenciales en la Secundaria Técnica 140 de Acayucan?
Hay que preguntar a los padres de 296 muchachos.
Las autoridades de salud no han indicado la imposibilidad para ello en Acayucan y la región.
¿Por qué 118 alumnos no acuden a clases presenciales?
De igual modo se debe preguntar a los paterfamilias.
En ambos casos se ubica un factor común: el potencial contagio del COVID cuya mortalidad es real y relativa: es decir, adquirir dicho virus en un cuerpo representa la potencial pérdida de la vida pero dicha tragedia es multifactorial y debido a ello tenemos la cifra de pacientes recuperados, anotada en el punto 1 de este artículo.
Un Telebachillerato ubicado en la comunidad de Cruz del Milagro, de Sayula de Alemán, reporta lo siguiente: a partir del 30 de agosto y hasta el momento los alumnos reciben clases virtuales de lunes a jueves.
Los viernes alumnos y maestros se presentan en el plantel para revisión de avances del programa escolar y la asignación de tareas a realizarse el fin de semana.
Otro caso: a la Telesecundaria en el municipio indígena -Nahua- de Mecayapan, se presentó menos de una docena de alumnos el primer día de clases.
Maestros, padres de familia y autoridades municipales acordaron desarrollar el ciclo escolar 2021-2022- de manera virtual.
Aquí, empero, los maestros se alternan y acuden al plantel dos o tres días a la semana para mantenerlo abierto y atender a padres o alumnos solicitantes de algún servicio.
El Cbtis 48 de Acayucan ha jugado un papel esencial durante la aplicación de vacunas contra el COVID desde que éstas arribaron a la región en el transcurso del 2021.
En sus instalaciones -aun durante el período vacacional- ciudadanos de Acayucan, Oluta, Soconusco, de 60 años y más hasta los grupos de 50-59, 40-49, 30-30 y los días que corren de 18 a 29 años de edad, han sido vacunados en algunos casos con el avance de doble dosis y otros apenas con la primera.
Mañana, miércoles, la dirección de esta escuela dará información a reporteros sobre las condiciones del ciclo escolar en su caso.
Las instalaciones de la Escuela Secundaria General de Acayucan (ESGA) sufrieron daños estructurales durante el sismo del 2017.
No se han reparado.
Tal daño físico en la escuela, sumado a la pandemia, generó la suspensión de clases presenciales hasta el momento. La ESGA opera bajo el sistema de clases virtuales.
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En el sur de Veracruz -entiendo ocurre igual en el país- el ciclo escolar 2021-2022 se ha desarrollado durante su primer mes de forma variopinta ante una realidad inédita.
México es un país multicultural dueño de rostros socioeconómicos no solo contradictorios sino salvajemente repletos de injusticias y contrastes extremos: ubicados entre la riqueza y la pobreza extremas, amén de una variedad histórica y lingüística que lejos de remitir al orgullo ubica a sus protagonistas de cara a la discriminación.
No resulta extraño -dada la complejidad de nuestra realidad sociopolítica- la presencia de acuerdos entre los múltiples integrantes de un microuniverso educativo -una escuela primaria, secundaria o de bachillerato- cuya vigencia se rompa de un día para otro porque “arriba así lo decidieron”.
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Hablar sobre las vinculaciones entre el sector educativo y otras estructuras como la macro y microeconomía, exige artículos aparte.
Es el caso de las pérdidas en el ámbito de la calidad sufridos por los alumnos en general debido al confinamiento obligado por el COVID.
Añadamos otros aspectos clave en la convivencia social: la violencia intrafamiliar, el incremento de la pobreza en general, los daños psicológicos de las familias en general, la deserción escolar de quienes -niños y jóvenes- han pasado a formar parte del sector laboral formal o informal.
La cabeza de la hidra, llamado COVID no deja de reproducirse…. |
