AUNQUE muchos defendieron al Instituto Nacional Electoral y lo siguen defendiendo de los ataques que provienen del poder ejecutivo federal, el organismo, ahora en manos de nuevos consejeros, podrían sucumbir ante las presiones ejercidas desde palacio nacional para hacerse manifiesta una traición al pueblo mexicano, en las próximas elecciones.

Las opiniones crecen considerablemente en este sentido, porque se afirma que ya no habrá la misma fortaleza de espíritu, ni la misma convicción nacionalista que poseían los anteriores responsables de esta institución, tanto que se presume desde ahora que el INE podría estar, desde este momento, sirviendo a los intereses de quien tiene el mando nacional.

Se corre el riesgo de que el organismo en cuestión, de verdad, sea tocado y se vengan para abajo todos los esfuerzos que se realizaron para defenderlo de los ataques del poder. Morena, ya no está en condiciones de presumir su ascendencia sobre las demás organizaciones políticas, más cuando éstas están en proceso de unidad política para las próximas elecciones presidenciales, por lo que hay plena seguridad de que el partido político en el poder, con todas las ventajas a su favor, intente nuevas estrategias políticas, entre ellas, el mismo sometimiento del organismo regulador de los procesos electorales.

Se entiende que ya dentro del INE, operan evidentes infiltrados que están trabajando para favorecer a Morena en las elecciones presidenciales, lo que tendrá como resultado final, que el Instituto, rompa con sus principios de imparcialidad, obligándolo a tomar otros caminos que no son, precisamente, los que han definido su presencia de buen árbitro en todos los procesos electorales que se han llevado a cabo.

Para las próximas elecciones, ya no estarán Lorenzo Córdoba, ni tampoco Ciro Murayama, para enfrentar los embates del poder presidencial, y en cambio, la nueva consejera presidenta del organismo electoral, Guadalupe Taddei Zavala, podría estar actuando incondicionalmente en favor de la cuarta transformación, obedeciendo, en cierta forma los mandatos presidenciales, por encontrarse, de alguna manera relacionada con el gobierno actual. Se sabe que toda su familia se encuentra vinculada a López Obrador, por diversas razones de carácter político.

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OBRAS DE SEGURIDAD NACIONAL

HASTA AHORA, tanto analistas políticos como estudiosos del derecho, no han encontrado plenas evidencias de que haya una amenaza a la infraestructura que se está construyendo en el país por capricho presidencial. La ley de seguridad nacional, establece plenamente cuáles serían, en todo caso, las condiciones que deberían cumplirse para que las obras que se pretenden blindar, otorgándoles un carácter estratégico, entren dentro de la consideración de seguridad nacional.

Lo que se quiere, principalmente, es alejarlas de cualquier investigación que descubriera los malos manejos que han tenido, así como la posible corrupción que se esté generando en ellas, de manera principal, el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas, que son en este momento las que más llaman la atención pública, por los fuertes inversiones que se han hecho y que se siguen haciendo, a pesar de que parecen ser barriles sin fondo, porque aún no se terminan y requieren, al parecer, de mayores recursos económicos.

En otras consideraciones sobre el tema, mucho se ha comentado que el blindaje que quiere el presidente, obedece a cierto ocultamiento momentáneo de todas estas irregularidades que se están dando y que pudieran, en el futuro inmediato, ser el principio de la explosión de la bomba que pondrá a la cuarta transformación en serios aprietos, tanto que se teme, al parecer, que muchos de los más destacados funcionarios, incluyendo al mismo presidente, pudieran estar en serio riesgo de ser llevados al banquillo de los acusados y pisar las frías celdas de una prisión, luego de que, finalmente, no puedan comprobar fehacientemente la erogación de los recursos públicos de la nación.

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LA PREFERENCIA POR UN CANDIDATO DE LA SOCIEDAD CIVIL

CUANDO MENOS, para el Estado de Veracruz, se ha comentado mucho que existen posibilidades de que la sociedad civil intervenga directamente en las propuestas para que la coalición política de partidos políticos, puede definir a un candidato que sea valorado y respaldado por todos los sectores de la sociedad.

En ese sentido, se ha comenzado por buscar un perfil adecuado, manteniendo, desde luego, los que ya levantaron la mano y que han demostrado tener, además, una experiencia y trayectoria política.

Entre los más considerados aptos para esta tarea, siguen siendo Pepe Yunes, Héctor Yunes, Julen Rementería, así como una mujer que, en cierta forma, también se ha destacado en este quehacer, refiriéndonos a Anilú Ingram Vallines, como representante de las mujeres, quien, finalmente, podría estar en la jugada.

Pero, no se descarta que surgiera otro perfil que pudiera ser arropado por la coalición política.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.