LA UNICA vez que parece haberse expresado políticamente dentro del proceso electoral para la sucesión en el Estado de Veracruz, Ricardo Ahued dejó muy claro que lo dejaran afuera y que su propósito era trabajar por Xalapa, independientemente de haber declarado que era un permanente aliado de Rocío Nahle, la secretaria de energía y posible candidata de Morena, a la gubernatura del Estado.

Todavía en este espacio se insistió mucho en que su posición discreta y estratégica a la vez, tendría algún efecto político si es que la zacatecana no resultaba ser la elegida por el presidente, dándole la oportunidad de colocarse como la segunda opción que se manejaba, incluso, desde el Altiplano donde se cocinan las candidaturas de todas las gubernaturas que estarán en juego.

Y aunque no lo crean, Ahued sigue colocado en esa segunda opción que tiene Morena, porque todavía no se definen las cosas de manera definitiva, porque muchas veces se dice que de la boca al plato, se cae la sopa. Sin embargo, con el solo hecho de que Rocío Nahle sea la candidata, Ahued obtiene desde ahora un futuro prometedor, porque siendo un político muchas veces mencionado como aspirante a la candidatura, aunque siempre lo negó y en contrario dijo que él era un aliado de la senadora con licencia. Ganado, pues, tiene un lugar privilegiado en la futura administración de Veracruz, si es que Nahle es candidata y gana las elecciones del próximo año.

Realmente, para quienes conocen perfectamente bien al alcalde xalapeño, se dice que ha jugado extraordinariamente la base asignada desde hace tiempo y que ha sabido responder, eficazmente, a su cometido. Se insiste, pues, que Ricardo Ahued es un político preparado, responsable, sensible y capaz para poder continuar destacando en el ambiente político de Veracruz, donde habrá de demostrar que su pasión es la política y que ha sabido practicarla con respeto y segura convicción en favor de quien o quienes lo necesitan.

Por ahora, Ahued ha conseguido colocarse como el mejor alcalde de México, con un trabajo municipal nunca visto en la capital del Estado, con una presencia envidiable en el ánimo popular de Xalapa y pleno reconocimiento nacional que lo sitúan, como ya lo hemos comentado en diversas ocasiones, como el hombre que dará mucho de qué hablar en el futuro inmediato de la entidad veracruzana.

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MARLON, UN HOMBRE CON FUTURO

EL TODAVÍA DIRIGENTE estatal de Partido Revolucionario Institucional, Marlon Ramírez Marín, ha sido un hombre sensible en la política y ha sabido recuperar esfuerzos para mantenerse limpio en el ejercicio político de su partido. Tarde o temprano, téngalo por seguro amigo lector, lo encontraremos en el Altiplano por la vía de dos posibles plataformas, es decir, una diputación federal o bien la senaduría de la República, posiciones que estarán en juego y en las que participará en su búsqueda el joven talentoso que ha perdurado al frente del tricolor muy a pesar de que antes de tiempo lo comenzaran a rondar las aves de rapiña.

Es amigo del dirigente nacional del PRI, pero ante todo un incondicional aliado del priismo en el Estado, donde ha logrado acomodar sus fichas para lo que viene el año próximo. Por ahora, ha demostrado que tiene empuje con los diversos enfrentamientos que ha tenido con la oposición, pero que le han servido para situarse como uno o quizá el único defensor de los intereses políticos del PRI, dentro y fuera del congreso, porque su afán político no se mide solamente con las palabras, sino también con los esfuerzos que realiza en toda la entidad para darle fuerza y unidad permanente a su partido.

Es de creerse que como tanto sucede en la política, hubo momentos clave en que lo dejaron solo para que asumiera los grandes retos que tuvo el PRI en Veracruz, y que todavía los tiene y que ahora, en nuevos tiempos políticos, ya lo quieren fuera para no dejarlo que avance, sabiendo de antemano que vienen, tal vez, los tiempos de recompensa política.

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HÉCTOR, EL DISCRETO COMISIONADO DEL IPAX

HÉCTOR MANUEL RIVEROS HERNÁNDEZ, Comisionado del Instituto de la Policía Auxiliar y Protección Patrimonial para el Estado de Veracruz, es considerado como uno de los más discretos funcionarios del sector público que ha logrado dirigir con eficiencia los destinos de una corporación policiaca que está destinada al debido cumplimiento de una misión importante como es cuidar la seguridad privada del sector empresarial, encomienda que no ha resultado fácil para quienes tienen esta responsabilidad.

Sin embargo, a lo largo de estos años, Héctor Manuel Riveros Hernández, ha sabido mantener sus estrategias en materia de seguridad privada con alcances muy profesionales, pues los resultados están a la vista de todos y con una aceptación cada día se manifiesta más de parte de los empresarios y dueños de negocios que normalmente contratan sus servicios.

Aún así, el Comisionado del IPAX, sigue siendo un hombre discreto, capaz y responsable, sobre todo, respetuoso del quehacer de los demás.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.