Molina, cuya ganadería fue galardonada en México y Estados Unidos por su calidad de la raza cebú, tenía contactos con todo el sector en el país y denunciaba un robo creciente de reses en Veracruz. Un millón de novillos y animales en pie, aseguró, cruzaban al año de manera clandestina el río Usumacinta.
“Acá en México, con sobornos de por medio, entran al padrón regular sanitario para su comercialización natural”, acusó.
“Es una competencia desleal para los ganaderos que crían y cumplen con todas las campañas y normas de sanidad, porque se compra a mitad de precio y se vende al precio real”, declaró en el programa de radio Juan Carlos Molina, uno de los pocos ganaderos que levantó la voz ante el crecimiento del tráfico de reses en pie.
“Además, representa un grave riesgo sanitario como fiebre aftosa, que pondría en jaque a la ganadería nacional, cuyo cliente principal es Estados Unidos”, agregó el líder cenecista de origen cuenqueño que se distinguía por su sombrero de ala ancha.
En su charla con los comunicadores de la Ciudad de México, el diputado priista alertó que tenía información de que el modus de introducción clandestina estaba cambiando, porque en vez de cruzar el ganado vacuno por el Usumacinta, ahora el plan consistía en trasladar a los animales vivos en barco desde Centroamérica hasta Sonora, entidad que fue sancionada por Estados Unidos con la suspensión de compra de ganado hasta demostrar que cumplía con todas las medidas de seguridad sanitaria.
Semanas antes de su muerte, el ganadero veracruzano sostuvo reuniones con la Comisión de Ganadería de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, y con el entonces titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), Víctor Villalobos Arámbula, quien se comprometió a abatir el contrabando con la Guardia Nacional.
David Monreal, actual gobernador morenista de Zacatecas, hermano del ahora líder de los diputados federales de Morena, Ricardo Monreal, y quien en aquél entonces se desempeñaba como coordinador general de Ganadería de la SADER, evadió hablar sobre el mercado negro de becerros y tráfico de aretes con registro sanitario, consignó en noviembre de 2019 el columnista Alejandro Sánchez.
Anteayer, especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) alertaron que el gusano barrenador, la larva de la mosca Cochliomyia hominivorax que afecta al ganado, a la vida silvestre, e incluso a los humanos, está avanzando hacia México. De acuerdo con sus últimos estudios, indicaron que el contrabando de ganado podría estar acelerando la propagación de la plaga y ampliando la vulnerabilidad en el país, según publicó el medio digital de la periodista Carmen Aristegui.
En Veracruz, a raíz de los crímenes en septiembre pasado de Hipólito Rodríguez Betancourt, director de Desarrollo Económico del Ayuntamiento de Playa Vicente, y su padre Hipólito Rodríguez Sánchez, cobró relevancia el señalamiento en contra del presidente de la Unión Ganadera Local de Isla, Ramón Martínez Tress, quien estaría violando las normas fitosanitarias en complicidad con el subsecretario de Ganadería del Gobierno del Estado, Humberto Amador Zaragoza.
Como se recordará, a finales del mes antepasado el funcionario municipal de Playa Vicente y su progenitor fueron “levantados” por hombres armados al salir de unas carreras de caballos en Palma de Oro, congregación del municipio de Isla. Sus cadáveres aparecieron días después en la entrada de la comunidad Cascajal, del municipio de San Juan Evangelista, sobre la carretera federal Sayula de Alemán–La Tinaja.
Se presume que se trató de una venganza por el aseguramiento de dos jaulas de ganado que se había hecho una semana antes en Playa Vicente al dirigente ganadero Martínez Tress, ex aspirante a la alcaldía de Isla por Morena y presunto protegido de uno de los líderes delictivos de la región de villa José Azueta, Jacinto Rodríguez, jefe del grupo de “Los Piñas”.
El ganado, de acuerdo con el medio digital Municipiosur.com, del periodista Federico Lagunes Peña, era propiedad de la mencionada organización criminal, lo que habría motivado la venganza contra el director municipal de Desarrollo Económico y su padre, quienes fueron privados de la libertad al salir de unas carreras en la comunidad de Palma de Oro, municipio de Isla, donde se encontraba el líder delictivo Jacinto Rodríguez, así como su gente, encabezados por Recsi Ramírez Merlín, “El Recsi”, su mano derecha, de los cuales se sospecha que estarían detrás de estos hechos de violencia.
Por mera coincidencia, previamente en su columna Punto de Vista, el periodista Filiberto Vargas abordó precisamente este delicado tema y exhibió los altos niveles de corrupción a los que ha llegado:
“El truco era muy simple, y por ello pensaron que nadie lo iba a descubrir. *** Aprovechando que la organización de ganaderos de Playa Vicente no puede emitir aretes para los productores de su región, pues la actualización de su registro está en proceso, Ramón Martínez Tress, presidente de la Unión Ganadera Local de Isla, adquiría ganado de esa región y lo concentraba en un rancho que es propiedad de su socio (¿o cómplice?), el subsecretario de Ganadería en el gobierno estatal, Humberto Amador Zaragoza. *** En ese sitio les colocaban a las reses aretes que generaba la Unión de Isla, y de esa manera movilizaban el ganado y lo comercializaban, con el aval de una organización ganadera distinta al origen de cada animal. *** Fueron los propios productores de ganado de Playa Vicente quienes se percataron de esta irregularidad y lo primero que hicieron fue retener dos jaulas con animales criados en Playa Vicente, pero con aretes de Isla. *** Las leyes en materia de comercialización ganadera en el país disponen que las organizaciones de productores deben regularizar los censos ganaderos y la emisión de aretes que se distribuyen por medio de las ventanillas del Sistema Nacional de Identificación Individual de Ganado (SINIIGA). *** La Unión Ganadera de Playa Vicente tiene como plazo el 30 de septiembre para realizar ese trámite, pero mientras eso sucede no puede haber movimiento de facturas ni de aretes. Al representante de los ganaderos de Isla se le hizo muy fácil: ‘compro barato el ganado en Playa Vicente, lo concentro en el rancho de mi compadre, el funcionario estatal, le pongo aretes de mi Unión y luego lo vendo como ganado de Isla’. *** Esta es sólo una de las anomalías que han sido denunciadas (y están plenamente documentadas) que se cometen desde la Subsecretaría de Ganadería del gobierno estatal. *** Ya se van y perderán el blindaje del ‘amigo’ Cuitláhuac García. Se sabe que ese es un tema que pretende utilizar como ejemplo la gobernadora electa, para dejar en claro que ella no permitirá la corrupción.”
Pero, además, uno de los más interesados en este delicado tema debe ser José Luis Peña, el cónyuge de Nahle García, quien, en la pasada campaña electoral, durante la asamblea de la Asociación Ganadera Local General, celebrada en Sayula de Alemán, al sur de la entidad, tomó el micrófono para pedirles a los asistentes que comunicaran a otras personas sobre los beneficios que tendrían los productores pecuarios si votaban por la entonces abanderada de Morena a la gubernatura.
“Acuérdense, mi nombre es José Luis Peña Peña, esposo de Rocío Nahle. Ya ha dicho la candidata que primeramente Dios yo voy a estar ahí y cualquier problema que ustedes tengan, y si ganamos, que vamos a ganar, es inminente, yo voy a estar en el área de la ganadería sin cobrar nada, y lo único que voy a hacer es estar apoyándolos a todos ustedes.
“Y cuando no nos quieran, cuando no nos resuelvan, nos vamos a hacer un plantón al Palacio de Gobierno y yo los voy a acompañar a todos ustedes para que nos resuelvan todos los problemas que estamos aquí hablando”, expresó Peña, quien debido a las críticas que desató el video difundido en redes sociales, tuvo que conducirse a partir de entonces con muy bajo perfil. |