La hipótesis que maneja el Fiscal Luis Ángel Bravo Contreras en torno al homicidio de dos sacerdotes de Poza Rica, es tan temeraria como puede ser el discurso de Nicolás Alvarado en torno a Juan Gabriel, aunque en este segundo caso, se trate de una apreciación muy personal y en el primero, como se cita al principio, una hipótesis, cuyo valor de veracidad o falsedad aún está en pañales aunque no así su proposición afirmativa que en un lenguaje vulgar, para el Fiscal, el doble homicidio se concentra en una simple pelea de borrachos.

II

Por principio, las notas hablan del “levantamiento” de dos sacerdotes, Alejo Nabor Jiménez Juárez y José Alfredo Suárez de la Cruz, así como del sacristán, quien logra escapar de sus captores aunque es herido. Mientras, los reverendos son hallados muertos en un lugar conocido como “la Curva del Diablo”, maniatados y con varios disparos en diferentes partes del cuerpo, incluida la cara (según las notas periodísticas).

Por secuencia, y suponiendo que el Fiscal se debe de basar en la versión del Sacristán (testigo clave del evento), se dice que los sacerdotes ingerían alcohol con sus victimarios y el convivio acabó en conflicto, lo que de un plumazo, se descartó otro móvil distinto al que se concluye en el punto inicial de este comentario: simple pelea de borrachos.

III

Pero, ¿qué incomoda al entorno social la hipótesis de Luis Ángel Bravo? ¡Muchas cosas! Trato de enumerarlas:

1.- Luis Ángel dice que los curas utilizaban la Parroquia de Nuestra Señora de Fátima como “cantina”.

2.- Luis Ángel dice que los curas se emborrachaban, cosa que si lo dice en caso de estar vivos, quizás no se escandalice mucho la gente, pero muertos, de cierto modo, “legitima” lo ocurrido.

3.- Luis Ángel propone que los sacerdotes sacaron de sus casillas a los victimarios, tanto para profanar la Parroquia al robar las limosnas, robar dos unidades vehiculares, privar de su libertad a los clérigos, maniatarlos, y a uno de ellos, quizás el que más movió a su furia, dispararle nueve veces ¿¡qué motiva tanto enojo en una borrachera!?

IV

Por supuesto, la hipótesis de Luis Ángel Bravo, para la expresión social derrochada en las redes sociales, comentarios de café y la plática en casa u oficinas, tiene una sola calificación: no es creíble. Y ello puede llevar por la saña, el tiempo y modo para llevarla a cabo, y sobre todo, porque el Fiscal, al igual que su hipótesis, tienen la misma calidad o calificación tanto en este caso, como en otros que ha resuelto: tampoco es creíble…

Digo, por citar algo, baste recordar cuando apenas el pasado febrero, Luis Ángel Bravo Contreras dio a conocer la captura de José Márquez Balderas alias “El Chichis”, jefe de plaza de “Los Zetas” en Orizaba, mismo que en agosto del 2015, anunció  que éste había sido ejecutado en una cantina… al menos, la hipótesis del Fiscal “mató” al “Chichis” en un ajuste de cuentas aunque luego lo haya “revivido”, mientras que a los curas todo lo concluye en ¡una simple pelea de borrachos!

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