A falta de resultados efectivos en materia de seguridad pública y el incumplimiento hasta ahora de otra de sus principales promesas de campaña de encarcelar a Javier Duarte y de recuperar todo lo que su antecesor y sus cómplices saquearon de las arcas estatales –lo que en parte acrecentó la deuda pública a 42 mil millones de pesos, cuya reestructuración a 30 años se resisten aprobarle en el Congreso local los diputados del PRI y de MORENA–, este domingo el gobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares quiso sorprender a los veracruzanos con la detención del ex mandatario interino Flavino Ríos Alvarado.

Sospechosamente, la primicia de la aprehensión de Ríos Alvarado no fue difundida por ningún medio informativo local sino que provino de un diario de la Ciudad de México muy afín a Yunes, lo que obviamente dio pie a todo tipo de suposiciones, la más generalizada es que se trataría de otra “caja china”, un show mediático a los que últimamente ha recurrido el gobernador del PAN para desviar la atención de la decepcionada ciudadanía que en junio del año pasado por fin lo llevó a la gubernatura luego de los tres intentos fallidos que hizo desde la sucesión estatal de 1998, cuando entonces, siendo aún militante del PRI, se le atravesó el ex senador priista Miguel Alemán Velasco, padrino político de Ríos Alvarado, quien hace cinco meses habría avalado ante el gobierno federal la designación de su ex secretario de Gobierno para que sustituyera interinamente a Javier Duarte.

El propio Flavino Ríos, quien dijo en entrevista que la orden de aprehensión girada en su contra era por el presunto incumplimiento de un deber legal y tráfico de influencias –supuestamente por haber contribuido a la fuga del ex gobernador Duarte de Ochoa por haber autorizado que le prestaran un helicóptero oficial al ex mandatario–, declaró que su detención se trataba de una “caja china”, pues afirmó que “no he cometido ningún delito y voy a demostrar que soy inocente”.

Igual opinó Andrés Manuel López Obrador, dirigente nacional de MORENA, quien la tarde de este domingo cerró en Xico su gira de cuatro días por 12 municipios del centro de la entidad. El fuerte aspirante presidencial reiteró que Yunes tiene un acuerdo con el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto para blindarse él y proteger a Duarte, y que “ahora la detención de este ex gobernador interino es propaganda, nada más”, pues refirió que su partido, el PAN, postulará a la alcaldía de Pánuco al ex contralor duartista Ricardo García Guzmán, mismo cargo que desempeñó en el sexenio del gobernador Alemán (1998-2004).

¿Por qué entonces Yunes decidió proceder penalmente contra Ríos Alvarado mientras que a García Guzmán –quien inclusive llegó a negar públicamente que existieran las llamadas “empresas fantasma” a través de las cuales Duarte y sus cómplices desviaron miles de millones de pesos– le acaba de ir a ofrecer personalmente la candidatura del PAN pese al rechazo de algunos grupos y destacados militantes de Acción Nacional que, como el secretario de Desarrollo Agropecuario, Joaquín Guzmán Avilés, ex alcalde y ex diputado de Tantoyuca, consideran al ex priista políticamente impresentable? 

Es más, en su campaña electoral por Pánuco, Yunes Linares acusó en un mitin al ex funcionario: “Tu, Ricardo García Guzmán, eres tapadera de la corrupción de Duarte. Te pusieron como contralor para que tapes la corrupción de Duarte; esa es tu tarea.”

Pero, además, el entonces candidato de la alianza PAN-PRD a la gubernatura también señaló a los hijos del contralor, principalmente a Ricardo García Escalante, al que acusó de ser un alcalde ratero y vinculado con el crimen organizado.

“Pero (en esa familia) –expresó Yunes hace aproximadamente diez meses– no se conforman, también quieren tener diputados. Tienen al papá como tapadera y contralor, tienen al hermano como presidente municipal robándose el dinero de los panuquenses y aliado con la delincuencia. Y hoy quieren tener a un diputado local que siga tapándolos. Pero se les acabó la fiesta señores Guzmán”.

¿Si desde entonces sabía que el ex contralor y sus hijos no sólo están implicados en presuntos actos de corrupción sino que inclusive tendrían vínculos con la delincuencia, porque en lugar de proceder contra ellos ha decidido protegerlos y blindarlos políticamente?

Actualmente circulan en las redes sociales audios de presuntas conversaciones de un hijo del ex contralor García Guzmán con supuestos operadores de grupos delincuenciales establecidos en la región de Pánuco. ¿Eso lo desconoce Yunes Linares, quien este sábado 11 estuvo en Poza Rica para ir a reiterar su compromiso de resolver el problema de la inseguridad en la zona norte de Veracruz? ¿Ignora también quién es el alcalde del PRD que en la comarca pozarricense señalan de estar inmiscuido en el negocio de autopartes robadas? Lo debe saber, pues suele jactarse de ser un gobernante muy bien informado. 

No obstante, en Poza Rica, Yunes presumió que con la de este sábado llevaba “23 reuniones en cien días con el Grupo de Coordinación, es decir con el Ejército, Marina, Procuraduría, Policía Federal, Fiscalía del Estado, Seguridad Pública… 23 reuniones, una cada cuatro días… soy un gobernador que me comprometí a resolver el problema de la inseguridad, y que lo voy a resolver”, reiteró.

Y dijo que aunque a muchos no les guste y prefirieran “que les hable con mentiras”, señaló que es imposible revertir en cien días “un problema de muchos años, de abandono total, de corrupción total, esa es la realidad…” 

Pero en Pánuco, por su obvio interés político-electoral, decidió proteger al ex contralor duartista y a sus hijos, a los que en su campaña acusó públicamente de corruptos y de estar aliados con la delincuencia.