Hoy todo mundo se adjudica la captura del ex Gobernador Javier Duarte de Ochoa, hoy todo mundo es el más santo de los santos, hoy nadie ha tenido ni tuvo vínculos con nada ni nadie de lo que huela a esa familia, hoy niegan a todos y a todo lo que pueda o pudiera tan solo levantar sospecha de que están relacionados con Duarte y sus negocios.

Algunos más avezados se dicen mártires y súper héroes comentando que han enfrentado contra viento y marea, las adversidades y tempestades de la ira y la venganza política en contra de su familia. (Pobres como sufren)

Lo cierto es que de una u otra manera todos los actores políticos veracruzanos, tuvieron y muchos aún tienen enormes vínculos con este personaje oscuro y sus turbios negocios, la mayoría de ellos rendían culto a su majestad Javidu, le celebraban todo y le aplaudían cada acto de gobierno, y eso nadie lo puede ocultar, ni mucho menos desmentir, hoy lo niegan. 

Nadie me quita de la cabeza que todo esto es un show mediático, con única finalidad de hacer que levante en las encuestas el Partido Revolucionario Institucional, lo cual por supuesto no sucederá, tendrá lamentablemente para ellos, un efecto contrario, y ese efecto pegará con más fuerza en las urnas este año pero mucho más el próximo.

Lo he comentado en varias ocasiones, hay en México una partidocracia agotada, señalada, desacreditada, corrupta, inepta, abusiva y que ya no funciona, debe de alguna u otra formar desaparecer, para darle paso a las instancias ciudadanas, pero de verdad ciudadanas, libres de todo nexo partidista, de toda corrupción.

Hoy en día la política no solo en México, sino en todo el mundo es una vergüenza, quizás en algunos países sean más transparentes, sancionen con mayor rigidez a sus políticos corruptos, pero eso no quita que también sean una sociedad corrompida por las malas prácticas y los malos gobiernos.

Debemos de retomar la política de beneficio social, de cero corrupción, de vivir en la honrada medianía, de la transparencia y el trabajo en conjunto con la sociedad, para dar más y mejores resultados, pero y aquí viene el obstáculo, tal parecería que eso jamás sucederá, que solo son sueños guajiros, lejanos e imposibles.

Aunque en honor a la verdad un servidor es de los pocos que creen que aún se puede hacer algo por nuestro país, que las adversidades se superan con trabajo esforzado y dedicación, pero sobre todo con lealtad y probidad hacia la patria. 

Hoy que capturaron a Javier Duarte de Ochoa, debemos tomarlo como un hecho que por fuerza tenía que suceder, que era obligación de la autoridad federal detenerlo, se lo debían a la ciudadanía, se lo debían a ellos mismos; pero en honor a la verdad debieron hacerlo desde el primer día que pidió licencia al cargo de gobernador, no 184 días después, debieron hacerlo en otro momento, no en año electoral, esto solo desacredita la captura y pone en tela de juicio, el por qué y el cómo, y vuelve a dar como consecuencia la vieja idea de que en política se juega con los tiempos, y la forma y el fondo, no importan.

Somos verdaderamente una burla y una caricatura de país, completamente desacreditado con la ciudadanía, señalados, y criticados al interior e internacionalmente, aquí lo único que queda es esforzarse más para cambiar las percepciones de adentro hacia afuera, lo que veo imposible. 

La señales son muy claras el destino nos alcanzó y no hay mucho para donde hacerse, así que renovarse o morir. 

PD. ¿Dónde están los Diputados Federales priistas que otrora defendían al ahora detenido ex Gobernador? No los vemos, no los oímos, caerán sin duda también caerán, el karma es más fuerte y todo se paga aquí, tarde que temprano. Correo electrónico: bernardobellizzia@hotmail.com