De que el alcalde de Catemaco Jorge Alberto González Azamar se ha vuelto un peligro para Catemaco, pocos lo dudan; pero de que se ha convertido en un trance para él mismo, es algo que está ocurriendo y él no se ha dado cuenta.

Su falso  discurso de honesto y defensor de los sectores vulnerables, llegó a caer en gracia entre sus coterráneos, ante la caída de su compadre el ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, de quien se dice era su principal promotor en las cuestiones políticas y financieras.

Prueba de esto es que como una estrategia política electoral, meses antes del aborto sexenal del Gobierno Veracruzano y de la aprehensión del malogrado Javier Duarte de Ochoa, en redes sociales circularon fotografías de Duarte a todo sonrisa con los compadres incómodos María Luisa Domínguez Bucio y Jorge Alberto González Azamar, quienes quisieron demostrar fuerza política, sin embargo las cosas le salieron al revés, porque ahora con el registro de las corruptelas de los Duarte Macías, los Catemaqueños no quieren saber más de los mismo y precisamente “Cachetón” pertenece a ese pasado que tanto daño le causo a la paz social de los Veracruzanos, por lo que se ve difícil que se quebrante la democracia entre los Catemaqueño en favor de la candidata a la municipal por el partido Nueva Alianza, la cual es precisamente Doña Maria Luisa.

Ante la mancha de los Duarte, se dice entre los Catemaqueños que el proyecto electoral municipal de Jorge Alberto González Azamar, no transitará por la sencilla razón  que ha acumulado una serie de agravios que nadie les perdonará. Vamos, ni yendo a caminar hincado a la basílica del Carmen, le perdonarían sus enemigos todas sus deslealtades, basado en que traicionó a todos los que lo ayudaron a llegar a donde está.

Pero esto no es todo, ya que el Presidente Municipal Catemaqueño, en una franca traición al partido que lo llevo al poder, se encuentran trabajando a favor del Partido Nueva Alianza, no cumpliendo los compromisos que sostuvo con sus coterráneos, pero en cambio se ha  dedicado a negociar las arcas municipales convirtiéndose en un nuevo rico de esta región. Ante esta situación caótica que se vive en este municipio, los diferentes sectores de esta población están arrepentidos en haber votado por este personaje.

Y hasta aquí dejamos esta historia “cachetona” por el momento, y la de los demás munícipes la dejamos pendientes, porque son  de lágrimas y risas, y nos vemos en la otra.

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