Es su momento.
Van por 90 alcaldías y la disputa en abierto por las cinco plazas que más votación registran: Xalapa, Coatzacoalcos, Poza Rica, el corredor Veracruz-Boca del Río y la pinza Tantoyuca, Tuxpan y Pánuco.
Los sueños guajiros del PRI del “Clavillazo” Ochoa Reza y el ingenuo Renato Alarcón de alcanzar una elección de tercios -70 alcaldías para cada una de las tres fuerzas mayoritarias- se vienen abajo al no poder remontar ese tercer lugar en el que fue colocado en la última votación.
En los altos mandos de Bucareli se estiman victorias en no más de 36 municipios con la pura morralla, es decir, se ganará en las localidades más pequeñas, con el menor número de votantes y de las regiones más apartadas del estado.
Persistirá el voto de castigo al mal gobierno y saqueo indiscriminado de las arcas y será entregado el sufragio, no al PAN, sino a los morenos que en labor de zapa recorren por estos días pueblos y ciudades en una singular promoción juvenil entregada a la izquierda liderada por Andrés Manuel López Obrador.
Mientras el Partido Acción Nacional, en alianza con el PRD, está a la espera de lo peor.
Al cumplirse la primera de cuatro partes del breve gobierno del señor Miguel Angel Yunes Linares, los resultados son verdaderamente catastróficos.
Y es que luego de la campaña electoral que lo llevó a la gubernatura tras capitalizar la bandera del antiduartismo, ya gobierno, no dio el giro obligado para echar andar a Veracruz.
Se siguió en el pleito.
Persistió en sus venganzas personales y el agotamiento del ¡Llevaré a la cárcel a Duarte! –finalmente no sería él quien lo llevaría- y desatar una pírrica cacería de brujas con dos que tres colaboradores del anterior gobierno con los resultados por todos conocidos.
Bermúdez en débil aprehensión temporal por faltas al deber público y lo que resulte, cuando su delito mayor es por genocidio y saqueo del dinero público; el “Gordo” Valencia, ex de Caev, tan solo un ratoncito; Leonel Bustos está libre y de los mil 200 millones nadie sabe, nadie supo; el ex tesorero Carlos Aguirre de pelada y el ex gobernador interino, Flavino Ríos en libertad aunque, eso sí, le pidieron el pasaporte para que no huya ¡Por favor!
La inseguridad pública creciente con el nuevo gobierno, el haber despojado a miles de veracruzanos de su empleo para entregarlo a los poblanos, la ausencia de resultados, la prensa veracruzana que se lo come todos los días y ese afán de imponer a sus hijos, uno como alcalde de Veracruz y al otro como su sucesor, han molestado a la sociedad civil.
Y para acabar el teatro montarse en un pleito sinfín contra Andrés Manuel López Obrador –“eso te hará candidato a la Presidencia de México”, dicen sus apologistas-.
Todo ello le ha traído serias consecuencias políticas.
De paso, le están reviviendo su pasado. Elba Esther Gordillo ha advertido de videos y grabaciones incriminatorias contra este bravo gobernante que un día –creo que hace muchísimos años- olvidó sonreír a la vida. Es el sin amigos.
Y en política todo ello tiene un costo.
Por ello, muy previsible que suelte Xalapa en aras de conservar el puerto, pero no podrá impedir que el enclave de Coatzacoalcos lo afiance el PRI. Peleará por Boca del Río y el corredor Córdoba-Orizaba, pero todo el norte lo entregará a los morenos con todo y que Tantoyuca está bajo control del “Chapito” y la familia García Guzmán.
Así pues, habrá que observar hasta donde se despintará el azul, prueba de fuego para Yunes Linares en sus afanes de perpetuamiento.
Solo es cuestión de días.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo |