Joseph Stalin, el peor dictador de la historia de Rusia había sido envenenado consumándose el complot de parte de sus más cercanos amigos y colaboradores.
En parangón algo parecido está sucediendo con el político más corrupto del planeta, Javier Duarte, a quien todos sus amigos, colaboradores y cómplices lo niegan y rechazan.
Jamás de los jamáses hicieron negocios con él.
Hoy todos son infidentes y claman por su crucifixión atacándose unos a otros, deslindándose “¡Si te vi, ni me acuerdo!”. Acusándose. Escondiendo sus riquezas sin apostar un céntimo en favor de quien les abrió las arcas.
¿Dónde quedaron los Ginos que daban la vida por el hombre?
En paralelo no hay registro de solidaridad, respaldo o conmiseración alguna de parte de Vicente Benítez, Juan Manuel del Castillo, Gabriel Deantes y el mismo Nemi en favor de Arturo Bermúdez.
Los compadritos dejaron de serlo.
Como perros arrinconados sin que nadie les dispense una mirada Audirac y el “gordo” Valencia, se pudren en Pacho… ¿Quién se atreve a visitar al decrépito Flavino?
Es la condición humana.
Es el saldo final del saqueo y corrupción que ha vivido Veracruz en los dos últimos sexenios en donde solo quedan para el recuerdo pasajes lastimosos de esa complicidad que en lo cotidiano se manifiestan en localizados personajes del Duartismo.
Acaso desapercibido pero no menos importante el ominoso silencio de Juan Antonio Nemi Dib, quien al día siguiente que se le vino encima el mundo a la vocera de Duarte, Gina Domínguez, sostiene que nada tiene que ver con ella.
Olvidaba sus alianzas en los años del gloria a partir del 2010; le dieron amnesia sus repetidos negocios en los años de vino y rosas; esa empresa que formó y le cedió para que continuara el flujo millonario; sus pactos y consejas infames para lastimar a periodistas críticos y todos los beneficios en abierto y en lo oscurito que recibió de ella.
Juan Antonio Nemi Dib, de todo es inocente.
No hizo nada malo a su paso por el IPAX. Tampoco tomó un centavo del DIF. En la Particular del Gobernador fue impoluto. Cuando estuvo al frente de la Secretaría de Salud fue traicionado y ya como secretario Ejecutivo del Consejo y Sistema Estatal de Seguridad Pública solo vio pasar el dinero federal sin robarse un peso.
De los beneficios que recibió de Gina Domínguez Colío también se desmarca a pesar de la denuncia periodística del portal “Animal Político”, que publica un reportaje que lo señala como uno de los beneficiarios de medios por parte de la ex vocera del gobierno de Duarte.
En el documentado reportaje se asegura que Gina utilizó su cargo para beneficiar con contratos y convenios a una empresa de medios que luego pasó a ser de su propiedad y a tres radiodifusoras que ahora controla editorialmente, “siendo uno de los socios, Nemi Dib”.
“Servicios Especializados de Comunicación en Imagen S.A. de C.V. (SECI) recibió al menos 17.2 millones de pesos entre 2013 y 2016”, suscribe..
Al respecto, Nemi ha reconocido que sí tenía constituida una sociedad por acciones (Servicios Especializados de Comunicación en Imagen S.A. de C.V.) con Miguel Ángel Gutiérrez Garduza, ex subdirector de recursos materiales de la SS y con Enedina Díaz Morales, ex colaboradora suya tanto en la SS como en el DIF Estatal.
No obstante “nunca se utilizaron las acciones. Teníamos constituida una sociedad por acciones que nunca utilizamos y que estaba en suspensión fiscal de actividades. Literalmente se la regalamos a Gina en ceros, sin ingresos ni egresos para que no gastara en una nueva sociedad”, respondió.
Juan Antonio Nemi Dib agregó que el cambio de accionistas se hizo mediante notario y que los ingresos son de menos de la tercera parte, son los acumulados de 7 años de El Molcajete Radio y El Molcajete TV, hasta antes de 2012, manifestó.
Por tanto, las fechas y las cifras dadas a conocer por Animal Político, “no coinciden para nada”, según Nemi en fiera respuesta.
La misma que sostuvo cuando retó a golpes a su sucesor en la Secretaría de Salud, Fernando Benítez.
“¿Qué le estas preguntando a este hijo de la chingada?”, explotó ese 18 de mayo de 2015, Nemi cuando reporteros entrevistaban al funcionario, previo al evento oficial por el 25 aniversario luctuoso de Rafael Hernández Ochoa.
Es la misma tesitura agresiva cuando respondió para defenderse de la denuncia que la columnista Claudia Guerrero presentó en su contra ante la PGR por violentar la libertad de expresión y por el desvío de recursos cuando estuvo al frente de la Secretaría de Salud.
“¡Yo soy quien voy a meter a la cárcel a la corrupta periodista!”, declaró a este reportero “al aire” en Avan Noticias provocando un conflicto de intereses que obligó a mi posterior renuncia del espacio informativo.
Ese es Nemi.
Fiero y altanero cuando le preguntan por sus propiedades en Xalapa y Puebla y no acepta la menor critica o responsabilidad cuando es señalado por Ricardo Sandoval, exjefe administrativo de Sesver, quien contraataca a Nemi y lo acusa ante la autoridad de “Daño Moral”.
Nemi se ha manifestado en repetidas veces dispuesto a comparecer ante la Fiscalía.
En esta ocasión es muy seguro que acuda, ya está lista su carpeta de investigaciones por más que presuma su alianza familiar y afectiva con uno de los Yunes.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo |