El título décimo del Bando de Policía y Buen Gobierno del municipio de Veracruz se refiere a las “faltas, infracciones, sanciones y recursos administrativos”. En el Artículo 96, detalla cuáles son las faltas que deben ser sancionadas. Son 18 y en ninguna de ellas se considera “ingerir bebidas alcohólicas en la vía pública”. Lo más cercano pudiera ser la primera definición: “alterar la tranquilidad colectiva, la seguridad y el orden en cualquier lugar y circunstancia dentro del territorio del Municipio”.
Así pues, los elementos de la policía estatal y la Marina, que cumplen labores policiacas, deberán demostrar en forma fehaciente que los reporteros que fueron detenidos en el bulevar de Veracruz la noche del pasado viernes “alteraban la tranquilidad colectiva, la seguridad y el orden”. De no ser así, estaremos ante un acto flagrante de represión y violación a los derechos humanos.
No hay, pues, tal “falta administrativa” y, por supuesto, cualquier estudiante de derecho sabe que el documento que les obligaron a firmar a los siete periodistas “levantados” por la policía no tiene validez alguna.
Todo esto lo debería saber la presidenta de la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas (CEAPP), Ana Laura Pérez, reportera de amplia experiencia, quien debió al menos verificar el marco jurídico en el que se basaban las autoridades para afirmar que la detención había sido “legal”.
Toda la vida, desde que existe el bulevar en Veracruz tanto quienes radican en el puerto de Veracruz como los visitantes han utilizado el muro como una “gran barra” y departen con amigos ingiriendo bebidas alcohólicas.
Hay fechas especialmente concurridas, como el amaneces de cada año nuevo. Incluso las autoridades municipales suelen montar templetes y patrocinar grupos musicales para que los asistentes se diviertan mientras esperan los primeros rayos del sol del nuevo año.
En los tiempos en los que la vigilancia del bulevar estaba a cargo de la llamaba Policía Naval, sus elementos recorrían toda la orilla de la playa en grupos de cuatro. Dos de ellos lo hacían por la banqueta y otros dos por la playa.
Cuando se encontraban a grupos ingiriendo bebidas alcohólicas, los invitaban –de forma amable, pero firme- a retirarse, para no molestar a los paseantes.
Las costumbres se hacen ley. Los abogados conocen ese precepto como “derecho consuetudinario”, que se refiere a normas jurídicas que no están plasmadas en ningún marco legal, pero se cumplen porque en el tiempo se ha hecho costumbre cumplirlas.
Este incidente nos remite, obligadamente, a aquel video que circula en redes sociales, en el que se observa a quien entonces era Director de Tránsito Municipal en Boca del Río, Jaime Téllez Marié, quien exhibió toda su prepotencia con una familia que había cometido el “gravísimo pecado” de subir su vehículo a la banqueta, en el bulevar.
El desplante de la noche del pasado viernes confirma que Téllez Marié ha logrado imponer su sello en la Secretaría de Seguridad Pública: Policías prepotentes y arbitrarios con la sociedad civil, pero ausentes y omisos con los delincuentes que se han apoderado de nuestras ciudades.
¿Esa es la tranquilidad que nos prometió Miguel Ángel Yunes Linares?
* * *
Epílogo.
Y mientras la policía preventiva se ensaña contra periodistas en el puerto de Veracruz, en Córdoba, Mario Rosas Muñoz, oficial de la Secretaría de Marina fue ejecutado a balazos la tarde del sábado en el estacionamiento de Home Depot, atentado en el que resultaron heridas, su hermana y sus sobrinos. Dos sujetos que viajaban a bordo de una motocicleta dispararon contra el marino cuando se disponía a abordar su vehículo. Silvia Araceli de 36 años de edad, hermana de Mario Rosas, fue herida en abdomen, brazo y antebrazo derecho; Lián Loyo Rosas de 15 años de edad, recibió un disparo que lesionó hombro y muñeca derecha. El más grave es Jaden Loyo Rosas de apenas 5 años de edad, quien recibió un disparo en la cabeza. Este fin de semana se reportaba su estado como “crítico”. *** La tarde del sábado fue encontrado el cuerpo de una persona a la que le desprendieron la cabeza, en la Panga Vieja del municipio de Agua Dulce. Vecinos del lugar dieron aviso a las autoridades locales. El cuerpo presentaba marcas de tortura, tenía las manos atadas y su cabeza fue colocada a corta distancia del cuerpo, con un mensaje escrito en una cartulina. *** Un hallazgo similar ocurrió en la congregación de Paraíso Novillero, perteneciente a este municipio de Cosamaloapan. El cuerpo de una persona decapitada, del sexo masculino, apareció flotando en las aguas del río Papaloapan. El cuerpo presentaba huellas de violencia. La cabeza no fue encontrada. *** El senador Pepe Yunes Zorrilla sostuvo una reunión de trabajo con autoridades en funciones y electas del centro del estado, así como con funcionarios federales, para establecer condiciones de trabajo en beneficio de los municipios. Ahí afirmó que el proyecto y el objetivo es que le vaya bien a Veracruz. *** Con profundo pesar me enteró del fallecimiento de un gran amigo y excelente ser humano. Descansa en paz Pedro Manterola Sáinz.
filivargas@gmail.com |
