Pero existe otro video con el cual también capitalizaron una elección y donde participa Rafael Abreu Ponce como empleado del Senado de la República, al servicio de Fernando Yunes Márquez. Al menos así lo identifica el gafete que se ven en su cuello y que se ven en otras fotografías en sus redes sociales.
El 5 de junio de 2016, en un grave error e inocentada de la Secretaría de Seguridad Pública entonces al mando de Arturo Bermúdez Zurita, policías estatales detuvieron un convoy de camionetas de lujo en la entrada de Coatzacoalcos, en donde viajaba el senador Yunes Márquez.
Lo anterior ocasionó que en pleno día de votaciones para la gubernatura, quien atrajera los reflectores del conflicto como víctima fuese el también hijo del hoy gobernador de Veracruz, manteniéndose en medios de comunicación nacionales prácticamente todo el día con el asunto de su “detención” y ayudando a promover a su padre en plena jornada electoral. (Muchos dicen que le faltó “colmillo” al gobernador Duarte y a su secretario de Seguridad Pública, porque podría haber detenido a todos los acompañantes de Fernando y dejarlo solo).
Desde el punto cercano al río Calzadas, quien acompañaba a Fernando era ni más ni menos que Rafael Abreu Ponce, quien además se la pasó grabando todo el rato con el celular a los policías discutiendo con el senador. En dicho video se ve a Abreu descendiendo con chaleco y lentes oscuros, celular en la mano y haciendo alardes, entre los cuales destaca le pide un mandato judicial a los policías para la revisión.
Otro que aparece a los gritos y mentadas diciendo “¡Ni madres!… ¡Los retenes deben tener un Ministerio Público y aquí no hay ningún Ministerio Público!” es Alejandro Wong Ramos, aquel político perredista que no quiso enfrentar a la justicia luego de agredir a periodistas en un bar del centro de la ciudad y se la pasó escondido durante largo rato. Esto en 2009.
OTROS POLÍTICOS SACAN RAJA DE LA DESGRACIA
Hay quienes dicen que la esencia de la filantropía es ayudar de manera desinteresada y sin buscar mérito alguno. No obstante, la clase política mexicana no lo ve así y se aleja de la buena voluntad en tiempos de desgracia.
Y es que así como le pasó a Abreu Ponce quien podría haber tenido las mejores intenciones (se duda ahora que ya confirmó que fueron por órdenes del gobernador), lo mismo le pasó a la diputada de MORENA por Coatzacoalcos, Rocío Nahle, quien fue captada también recolectando víveres para distribuirlos entre los damnificados. La legisladora se justificó vía redes sociales: “Una zona de mi distrito en Coatzacoalcos sufrió serios daños, ayudar y cooperar como representante de TODOS es mi responsabilidad… A Veracruz le pegaron dos desastres al mismo tiempo , sismo y huracán. Una zona de Coatzacoalcos sufrió terribles daños y se requiere apoyo”.
Pero el asunto es que también ella tiene intereses políticos y un partido al qué promover. De hecho es mencionada constantemente como candidata al Senado.
El periodista Hugo Morales Alejo lo resume finamente en una línea: “El oportunismo no es sólo del PRI y el PAN; es cultural ya de los políticos mexicanos”.
Y sí, ese es el problema: la clase política mexicana está tan desacreditada que nadie les cree.
EPÍLOGO MALHABLADO: Que dice la diputada Maryjosé Gamboa (la que atropelló y mató a un tatuador por conducir en estado de ebriedad allá en Boca del Río) que por favor no hablen mal de los neopanistas que se acaban de sumar a la bancada blanquiazul en el Congreso del Estado. Se tratan de los diputados Basilio Picazo y Regina Vázquez… Ahí le van unos datos: Basilio fue señalado como autor intelectual del asesinato del síndico de Coyutla, Miguel Alfonso Vázquez, ocurrido el 6 de mayo de 2005, y así lo confirmó en conferencia de prensa el entonces subprocurador de Justicia en la zona norte Jorge Yunis Manzanares al presentar a los dos presuntos asesinos materiales, Vicente Rodríguez Lazcano y Rodolfo Carballo Riveral, quienes en su declaración ante el Ministerio Público de Papantla involucraron al ex alcalde Basilio Picazo Pérez. Cuando ocurría la ejecución del síndico, los hermanos Picazo, Benito y Basilio, se hicieron los aparecidos en el café La Parroquia que se encuentra detrás del Palacio de Gobierno, y buscaron periodistas para saludar y así confirmar la coartada de que estaban en Xalapa, lejos de Coyutla… De Regina Vázquez no hay mucho en realidad qué decir, más que su historia pública de cómo su padre Cirilo Vázquez (siendo entonces Alejandro Vázquez Cuevas dirigente estatal del PAN y) le consiguió a ella y a su hermana Fabiola espacios en el partido blanquiazul en el 2003 sin mérito alguno más que ser la hija del “Cacique del Sur”. Bajo esas siglas, Regina fue diputada federal y su carnala alcaldesa de Acayucan, pero todo bajo el control de Cirilo. A la muerte de su padre el 19 de noviembre de 2006 (también ejecutado al estilo mafia) las hermanas Vázquez fueron inmediatamente cobijadas por Fidel Herrera Beltrán, quien las llevó de nuevo al PRI y desde ahí ocuparon posiciones de poder, hasta ahora que Regina volvió al partido la vio nacer… El asunto es también qué demonios pensaba el PRI al tener a este par dentro de sus filas: una conocida por sus conveniencias políticas y el otro por su negro historial. A lo mejor Maryjosé, en su papel como periodista, debería ir a preguntarle al secretario de Seguridad Pública, Jaime Téllez Marié, sobre las andadas de Picazo allá en la sierra de Papantla, pues en la comparecencia del titular de SSP éste ventiló que el diputado protege a talamontes. |