Por eso no es casual que los senadores priistas Héctor Yunes Landa y Pepe Yunes Zorrilla estén planteando la necesidad de reforzar la seguridad en el estado mediante una figura de Comisionado Federal.
Yunes Landa acaba de declarar que según datos oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), entre diciembre de 2016 y julio de 2017, en todo Veracruz se registraron mil 696 homicidios, de los cuales el 75% fueron ejecuciones del crimen organizado. Además dijo que se consignaron 121 secuestros, 188 violaciones y 13 mil 855 robos, de los cuales mil 869 fueron hurtos de vehículos con violencia.
El aspirante del PRI a la gubernatura indicó que estas estadísticas del SESNSP confirman que no existe una estrategia de seguridad en el régimen de Yunes Linares, y que por eso los delitos de alto impacto siguen creciendo.
El senador priista comentó que en Veracruz los homicidios dolosos aumentaron en 93.4% de enero a mayo del presente año respecto al mismo periodo de 2016, durante la administración del exgobernador Javier Duarte, al pasar de 323 a 625 asesinatos, alcanzando la cifra más alta de los últimos 20 años, de acuerdo con datos del SESNSP.
Aunado a ello, en el lapso enero-mayo de 2017, el secuestro creció 44% y la extorsión 240%, mientras que el robo de vehículos con violencia aumentó 84.46%, en comparación con el mismo periodo del año anterior. En general, la incidencia delictiva en la entidad creció 31.12%, de acuerdo con los periodos comparativos de 2016 y 2017.
Por ello, Héctor Yunes acaba de reiterar que el gobierno de la República debería designar a un Comisionado Federal en materia de seguridad, así como por decreto se nombró a mediados de enero de 2014 a Alfredo Castillo Cervantes al frente de la Comisión para la Seguridad y Desarrollo Integral de Michoacán, estado que hace tres años enfrentaba una crisis de inseguridad muy similar a la que actualmente padece Veracruz.
Y es que el senador del PRI apuntó que “el gobernador (Miguel Ángel Yunes) ni siquiera ha cumplido su compromiso de designar a un militar de alto rango para titular de Seguridad Pública”, sino que nombró a Jaime Téllez Marie, un abogado amigo del mandatario, “cuya única experiencia en el área es haber sido delegado de Tránsito en el municipio de Boca del Río”.
Paradójicamente, en el Plan Veracruzano de Desarrollo (PVD) 2016-2018, en el apartado sobre Gobernanza, Seguridad y Justicia, el mandatario estatal del PAN advertía que “de acuerdo con el Reporte Sobre Delitos de Alto Impacto (Observatorio Nacional Ciudadano de Seguridad, Justicia y Legalidad, 2016), en Veracruz la violencia impera, pero el reporte mencionado presenta diagnósticos no certeros ni minuciosos, por lo que cabe la posibilidad de un panorama aún más pesimista.”
Y es que según dicho reporte, Veracruz ocupaba a finales del sexenio anterior el segundo lugar en el ranking nacional de víctimas de secuestro y pasó de un promedio mensual, en los doce meses anteriores, de 14 a 14.92 víctimas, lo que representaba un aumento de 0.56%.
“Sin embargo –se consignaba en el PVD–, Veracruz ocupa el octavo sitio en carpetas de investigación abiertas, esto muestra que los secuestros no se persiguen como en otros estados.
“Veracruz, de acuerdo con las cifras de julio de 2016, es el cuarto estado con mayor cantidad de homicidios dolosos, 749 en el último año, presentando un aumento de 111.48%.
“En cuanto a homicidios culposos, hubo 693, lo que representa un aumento de 63%. Ambos han rebasado los records más altos desde 2012, uno de los años más violentos que ha sufrido el estado y el país.
“Veracruz es el quinto estado con mayor cantidad de robo anual de autos en el periodo junio-julio 2016, presentando un total de 6, 312 casos, lo que significó un aumento 13.69%.
“La media nacional de julio fue de 407.28 carpetas de investigación por robo de autos, cifra superada por Veracruz, que al comparar presentó un aumento de 110%.
“Veracruz ocupa el lugar 19 en robo de casa-habitación, con 2,085 casos y 3.66 negocios por cada 100,000 sufren robo”.
Y se puntualizaba: “Las cifras que se presentan como datos fríos no son números, son seres humanos que sufren olas de violencia en Veracruz. Las implicaciones de la violencia generan problemas psicológicos y económicos. Esta atmósfera de inseguridad inhibe el mercado, pero, sobre cualquier otro elemento, genera desequilibrio social, incertidumbre e injusticia.
“En Veracruz –se reafirmaba en el PVD–, reforzar el estado de derecho es el principal objetivo del nuevo gobierno para lograr un sector económico sólido con desarrollo humano y bienestar social bajo una perspectiva sustentable en el corto y largo plazos.”
Sin embargo, ahora estamos peor que antes. Y es que en materia de seguridad pública la crisis tiende a agudizarse el año próximo, pues el gobierno federal está por retirar de Veracruz a sus corporaciones y Yunes Linares ha comenzado a anticiparse para que los ayuntamientos de los principales municipios del estado que en 2018 serán presididos por militantes de MORENA, como los de Xalapa y Coatzacoalcos, reasuman su responsabilidades policiacas. |