Entre la familia Morena de los Tuxtlas, existe una gran incertidumbre por conocer quiénes serán los abanderados  a la candidatura a la Diputación local, basado en que existe desunión y desconfianza entre los suspirantes a esta designación electoral. Lo anterior obedece a la falta de acuerdos entre las diferentes corrientes Morenistas y a la nula mediación del dirigente estatal de este instituto político, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, quien aún no ve a un potente candidato que sume voluntades políticas en los municipios de Hueyapan de Ocampo, Catemaco y San Andrés Tuxtla. 

Ante esa situación, se anticipa que Juan Javier Gómez Cazarín, Gregorio Constantino Santos, Raúl Tovar Díaz, Vicente Mendoza Torres y los ahora “petistas” (PT), Aldo Sánchez Aguirre y Eulalio Ríos Fararoni, con todo y que en varias ocasiones han sido evaluados electoralmente, nada tienen seguro en torno a la nominación, basado en que no están plenamente identificados con la clase política de la izquierda y de la ciudadanía en general, que desea un cambio en la política local.

Por lo consiguiente no suman ni multiplican; siendo al contrario, ya que están restando en la cabecera distrital de San Andrés Tuxtla, en donde realmente se ganan los procesos electorales ante el número de votantes de esta demarcación, por la que, si no hay lazos políticos entre el candidato y las corrientes políticas y sociales de los Sanandrescanos, no hay triunfo. Así de fácil.    

En la lista final de Morena, se sigue manejando la figura del controvertido empresario Rafael Fararoni Mortera, quien a pesar de que fue atacado públicamente por un grupo de Morenistas, quienes desean impedirle su ascenso a este partido, los mandos del Comité Estatal de Morena no descartan la propuesta del ex alcalde Sanandrescano, a quien consideran como un político conciliador y de resultados electorales.

Los brujos de la mesa diabólica, comentan que con todo y los escándalos y el desgaste político, Rafael Fararoni Mortera, sigue siendo el favorito en las encuestas para ser candidato, por lo que es el único que podría detener al Frente Amplio en el 2018.

Ante esta situación, el Comité Estatal de Morena tendrá que pensar si compite con las probabilidades de triunfo del empresario Rafael Fararoni Mortera o se la juegan con los frágiles suspirantes, quienes viéndose perdidos podrían modificar sus principios izquierdistas, imitando al ex candidato Morenista Filogonio Mortera Castellanos, quien misteriosamente renuncio a la candidatura días antes del proceso electoral, por lo que quien tenga que decidir, tendrá una difícil tarea elegir a un real miembro de Morena.

El posible triunfo de Morena en el Distrito Electoral de los Tuxtlas, apuntalaría las probabilidades de que el “Peje”, Andrés Manuel López Obrador, llegara a la presidencia de la república y aun así el dirigente estatal de Morena, está desperdiciando su oportunidad de unir a la clase Morenista  de esta parte de la entidad y así de esta forma sacar a un buen candidato que de pelea en los futuros comicios electorales que estarán muy competidos.

 Y nos vemos en la otra.

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