Lamentable.
Arrepentidos deben de estar muchos electores quienes deliberaron que esta liosa izquierda pudiera venir a salvar toda la problemática social de sus localidades, cuando gracias a sus incompetencias han generado más conflictos que soluciones, recrudeciendo el clima de inestabilidad social que se vive en diversos municipios de la entidad.
En el sur de Veracruz, donde los seguidores de López Obrador habían alzado un significativo bastión se les ha acabado el encanto, gracias a sus imposiciones, a su falta de resultados y de compromisos para con los diferentes sectores de la sociedad.
Y es que sorprendentemente los alcaldes MORENOS no tienen poder de decisión, viéndose obligados en consultar todo con su dirigencia nacional y mientras los ciudadanos exigen remedios prontos y expeditos, son los primeros ediles quienes tienen que esperar la opinión de su líder supremo convertido en un falso defensor de la democracia.
Es más, resulta increíble que en temas tan sensibles como lo es la Seguridad Pública, sean los alcaldes de la línea de AMLO los que se nieguen a sentarse con las demás instituciones de gubernamentales, cuando debe de existir un trabajo coordinado sean del partido que sea, les guste o no les guste, ya que primero se encuentra la población y luego los intereses partidistas.
Por otra parte con el tema de las manifestaciones de los trabajadores municipales contra Víctor Carranza y ahora contra Hipólito Rodríguez, si bien es cierto son temas de fondo, también es verdad que la mayoría de los integrantes de este sindicato son los que se encuentran sufriendo las consecuencias de sus retenciones salariales.
Indudablemente estos presidentes municipales están mostrando su clara impericia, en vez de buscar otras vías de solución, prefieren el enfrentamiento frontal, sacrificando a trabajadores honestos que ninguna culpa tienen de las rencillas políticas.
La neta.
Incluso, ahora en Xalapa están a punto de cometer otra torpeza, puesto que según el criterio de la síndica, Ivonne Cisneros, las despensas que reciben los pensionados del ayuntamiento, "ya no hay por qué dárselas, porque ya no trabajan", por lo que circula fuertemente la versión de que les serán retiradas a las y los trabajadores retirados.
Pero esa será otra historia.
Ya veremos qué es lo que pasa, y si siguen con sus novatadas.
POR CIERTO mucho cuidado debería de tener el ex alcalde de San Andrés Tuxtla Manuel Rosendo Pelayo al asegurar que las instituciones le harán lo que el viento a Juárez.
El vapuleado ex presidente municipal luego de que se virilizaran unas imágenes de una supuesta graciosa huida en el aeropuerto de Veracruz, movió una fotografía entre sus aliados, de su asistencia a una consulta con el cardiólogo con la leyenda “por si estaban con el pendiente”.
Asimismo en una columna de índole estatal nos relatan que “Chendo” decidió incumplir al primer citatorio del fiscal Jorge Winckler y que anduvo de compras en un centro comercial, encontrándose con un reportero del Dictamen y que luego de su viaje “exprés” ya estaba de regreso en el puerto como “Tío Sebas, riéndose de todo el mundo”.
El tema en que el está metido Manuel Rosendo no es menor, los supuestos delitos que se le imputan tampoco lo son y más aún que se le agrega un presunto daño patrimonial por varios millones de pesos durante su gestión.
Caray, con estos asuntos no se juega.
Pero en fin, no hay peor ciego que el que no quiere ver.
Por lo pronto ya viene el segundo citatorio.
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