En el ámbito jurídico sigue habiendo un vacío para los candidatos independientes, de tal suerte que ellos pueden elegir un enemigo favorito cuando quieran y ese es su partido de origen.
Entre ellos buscan diferencias, son ellos sus enemigos, se enfrentan ante sus similares y se cuestionan y desacreditan. Esos candidatos, incluyendo todos los demás, se descalifican entre sí y no presentan proyectos sólidos y de fácil acceso para el electorado. Se olvidan de convencer al electorado por andar insultando al contrincante.
“Seré la única mujer en los debates presidenciales y hablaré de los valores como la honestidad”, aseguró la aspirante presidencial independiente Margarita Zavala, quien enumeró las dificultades que ha vivido durante los 33 años que lleva en la política de nuestro país.
Para Margarita Zavala sus principales enemigos son los misóginos dentro y fuera del PAN, dice: “No me dejaban ser diputada. Ricardo Anaya fue un gran obstáculo, cuando fue coordinador del grupo parlamentario del PAN”.
Es decir, para los candidatos independientes las campañas en busca del voto de la población se limitan a hablar mal de todos los que pueden llegar y a final de cuentas o no llegarán o van a negociar una declinación.
Es por ello que en lugar de presentar proyectos que no tienen prefieren criticar al contrincante. De esta manera no pierden el tiempo en elaborar programas de gobierno y a final de cuentas hacen alianza con alguno para alcanzar ellos, en lo individual, un buen puesto con el que gane.
Por ejemplo en el caso de Armando Ríos Piter, quien extrañamente declinó su candidatura por el PRD para la gubernatura de su tierra natal, Guerrero, a pesar de que estaba muy arriba en las encuestas, está en busca de un cargo, quiere ampararse en el hecho de que de 2000 a 2003 estudió la maestría en seguridad nacional en la Universidad de Georgetown, para tener un puesto como el de Renato Sales Heredia, como Comisionado de Seguridad Nacional o por lo menos de director general de la Policía Federal.
Por eso no hacen campaña de propuestas sino de anécdotas, de insultos, de venganzas discursivas contra sus partidos anteriores.
En el caso de Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, también convencido de que ganará la elección, es decir, que será Presidente de la República, increíble, pero en realidad lo cree. El nuevoleonés comentó que cuenta con toda una estrategia que le permitirá replicar el éxito que lo llevó a la gubernatura de Nuevo León en 2015, de cuya actuación nadie está conforme en esa entidad.
Recordó, lo que todo perdedor quiere recordar, que en la elección para gobernador empezó con 2 por ciento y terminó con 52 por ciento de las preferencias electorales. Por lo que al estar situado en la actualidad con 3 puntos porcentuales, consideró que es un gran avance que lo acerca a la posibilidad de conquistar la Presidencia de la República
Respecto a Andrés Manuel López Obrador, Rodríguez Calderón consideró que aplica la estrategia de dar un dulce cuando la sociedad está enferma; mientras que él buscará dar dulce, pero con inyección y con la solución. Todo un experto en temas políticos.
Considera Rodríguez Calderón que su personalidad silvestre, que a los mexicanos les remite a los tiempos de Fox, podría cautivar, como logró convencer al municipio de García, en su estado natal.
De Meade, señaló El Bronco, que enfrenta un grave problema que es la inactividad de la estructura de su partido que está molesta con él y con el sistema, lo que considera una oportunidad. Es decir, su rencor con el PRI por no haberlo dejado ser candidato a la gubernatura hace tres años, ahora supura una amarga nostalgia.
Pero como buen dicharachero que es todo hombre del campo, Anaya no se le fue vivo, y le dijo que es una mezcla perversa que no es posible al haber juntado a aquellos que toda la vida se confrontaron.
A quien dedica más tiempo en sus críticas siempre es a Andrés Manuel López Obrador, como si le pagaran por desgastarlo. En esta encomienda afirmó: “Andrés Manuel se vio en un espejo y dijo quiero ser Presidente y se firmó solo y ahora es candidato”.
Armando Ríos Piter, comentó: “estoy convencido que puedo ganar la Presidencia de la República”, pues asegura que hay un 32 % de indefinición en cuanto a los otros candidatos, que lo puede favorecer. Esto significaría que Ríos Piter erradicaría el abstencionismo que va en aumento ante la falta de credibilidad en las elecciones y sus resultados.
“Nosotros nos sentimos tranquilos, porque es el resultado de mucha planeación, alianza y esfuerzos, yo le apuesto al INE como árbitro que defina y se vaya a fondo, vamos a estar en la boleta”, dijo Ríos Piter.
Sabemos, desde ahora, que ningún independiente ganará la Presidencia de la República; pero están ahí para pulverizar votos, para desgastar candidatos reales y para ganarse un lugar en la próxima administración, desde luego, si gana el PRI.
Las funciones de los candidatos independientes deben ser mejor canalizadas por el INE, esta vez no se preocupó mucho por sus lineamientos porque su objetivo no es ganar la presidencia de la República sino desvirtuar la competencia electoral del tricolor.
Nadie puede creer en personajes que escogen la candidatura independiente ante la imposibilidad de lograrla al interior de sus respectivos partidos, de esta manera la pelea personal de Margarita Zavala es contra el PAN y Ricardo Anaya, que le negó la posibilidad de competir desde ese partido por el puesto político más importante del país; Jaime Rodríguez Calderón, a quien de bronco ya no le queda nada, tiene sus rencores con el PRI de Nuevo León, pero con el PRI nacional mantiene lazos firmes y sólidos, y Armando Ríos Piter, el más oportunista de los tres candidatos independientes, tiene en el PRD una institución que utilizó como trampolín para brincar a la popularidad, pero esto no quiere decir que se haya instalado en la preferencia electoral.
Los candidatos independientes van solos, completamente solos hacia una candidatura sin programas, ni proyectos ni objetivos claros.
PEGA Y CORRE.- El problema de la desaparición forzada tiene en Veracruz un duro golpe a la razón y la libertad. Esta vez cinco policías estatales y el subdelegado de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz, con sede en Córdoba, Patricio Lagunes, fueron detenidos acusados por la desaparición de un joven de 25 años. Es un problema que no es privativo de Veracruz, pero tiene en la entidad una reincidencia que podría convertirse en el estado número uno en la desaparición de personas. ..Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.
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