Un principio fundamental de la ley establece que todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario.
Existen elementos de sobra para pensar que Karime Macías Tubilla podría ser cómplice de su esposo Javier Duarte de Ochoa, preso por el presunto desvío de cientos de millones de pesos del erario público veracruzano.
Pero en tanto no exista la determinación de un juez, la ciudadana veracruzana nativa de Coatzacoalcos no debe ser culpabilizada ni exhibida dado que estas acciones violan sus derechos humanos.
Un paisano suyo, el doctor en derecho y ex titular de la Interpol México, Rodolfo de la Guardia García, habría opinado sobre el tema, ayer, de acuerdo a versiones que circularon en redes sociales.
No hubo desmentido al respecto y recojo, en ese contexto, un argumento del experto en jurisprudencia internacional:
“…una persecución política de parte del gobierno mexicano es una forma de defensa para poder justificar que el mandato judicial –contra Karime Macías de Duarte- tiene otras intenciones”.
“¿Qué si puede acogerse a este argumento Karime?
Yo te digo que sí puede, pero falta que tenga éxito.
¿De qué depende?
Su éxito depende de los argumentos y alegatos que pudieran justificar esa medida”.
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Traducido al lenguaje político electoral, el gobierno de Veracruz tiene exactamente 31 días a partir de hoy para que Karime Macías de Duarte sea detenida en Londres, extraditada a México y trasladada a un penal en nuestra entidad.
Bajo esas condiciones Miguel Ángel Yunes Linares lograría su objetivo: exhibir a la esposa del preso Javier Duarte como una pieza de cacería y reforzar con ello la campaña de su hijo Miguel Ángel Yunes Márquez en pro de reemplazarlo en la silla gubernamental.
De no ocurrir tal detención y traslado a suelo veracruzano antes del próximo primero de julio, Yunes Linares habrá fracasado en su estrategia…
Karime Macías podría terminar victimizada y los votos que le hacen falta a Yunes Márquez no llegarían.
Separemos las cosas: un tema es que Karime será culpable o no de haber robado a los veracruzanos junto con su marido y esté disfrutando de ese dinero en Londres…
Otra cosa es que tal acusación se demuestre ante la ley, frente a un Juez y que se aplique el rigor jurídico…
Y un tema muy distinto a los dos anteriores es el empleo de esta historia polémica de la vida política veracruzana con fines electorales, lo cual está ocurriendo…
Añadamos el elemento de la coyuntura del poder: sin el visto bueno y respaldo del gobierno federal el gobernador veracruzano no podrá conseguir su fin, sin importar los medios…
El desenlace de esta historia destapará, así pues, una eventual complicidad entre Yunes Linares y Peña Nieto o dejará en claro la ausencia de la misma…
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Es tan delgada la línea que separa a la justicia de la política que ayer fue dejado en libertad Juan José Farías (a) “El abuelo”, líder de las autodefensas en Tepalcatepec, Michoacán y presunto integrante del Cártel de Jalisco Nueva Generación.
“El abuelo” fue apresado el domingo 27 de mayo.
Este miércoles un juez federal lo liberó bajo el argumento de que su captura implicó la violación de sus derechos y no se fundamentó su presunta carrera delictiva como narcotraficante…
El ridículo del gobierno de Enrique Peña Nieto no pudo resultar de mayor gravedad.
La libertad de un presunto “pez gordo” del crimen organizado en México evidenció el quiebre estructural en el terreno de la procuración y aplicación de justicia federal.
Una falla estructural semejante ocurre a nivel estatal en Veracruz, lo que se ha evidenciado con un manejo político electoral de un tema legal con Karime Macías de Duarte como presunta culpable y convertida en víctima mediática.
Juan José Farías fue recibido con mariachis en su tierra, ayer mismo.
Karime Macías huye de los periodistas pero mientras no la detengan con base en una sólida herramienta legal la ex titular del DIF veracruzano sigue gozando de una riqueza de origen dudoso y la torpeza oficial puede convertirla en mártir…
La sociedad mexicana sumida en una crisis histórica padece daños que provienen de la ineficacia y el abuso oficiales.
Nuestros aparatos de gobierno, de seguridad pública, responsables de la justicia en los niveles estatal y federal no sólo actúan con torpeza y violan la ley, sino que hacen cada día más grande el hoyo en que se ha sumido el Estado mexicano durante décadas.
En parte por su origen y en parte por su desarrollo las historias de Karime Macías y Juan José Farías “El abuelo” son una muestra del estado fallido en que se ha convertido México.
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