EMPRESARIOS de todo el país, siguen preocupados por las condiciones políticas en que se encuentra el panorama político nacional. Y es que, recientemente, los mismos empresarios, generadores de empleo y otros beneficios para la clase trabajadora, han llegado al punto de su desconfianza, en que personalmente, han procedido a platicar con los trabajadores para pedirles no votar por Andrés Manuel López Obrador, debido al temor que ha cundido entre este importante sector del desarrollo nacional, sobre la política que enderezará este candidato a la Presidencia de la República, sí es que llega a ganar las elecciones venideras. No le tienen confianza como para dialogar y llegar a los acuerdos necesarios, porque se trata de una persona casada con un sistema del pasado y donde, además, le pone sus propios ingredientes, para en caso de que llegue a la Presidencia de la República, gobernar con mano dura, con lo que pondría en serio peligro a la nación y a los propios empresarios que trabajan para mantener la estabilidad económica de miles de familias que dependen de su empleo en dichas empresas.
Ante este escenario, López Obrador, le bajó algunas rayitas a sus constantes expresiones en contra del sector empresarial, buscando, además, reunirse con ellos para decirles que no pasa nada y que de ninguna manera les podría afectar y al contrario, entrar en pláticas para mejorar las condiciones en que se desenvuelve este sector. Aún así, los empresarios del país, no le creen y prefieren tomar estas respuestas a sus constantes presiones, como mera palabrería, propia de la demagogia que ha demostrado durante todo el tiempo en que ha buscado gobernar al país. El sector empresarial, ha tomado como ciertos los resultados de las últimas encuestas en que señalan al famoso Peje, en primer lugar de la preferencia electoral, de tal manera, que ya ven una decisión mayoritaria a favor de su proyecto político y eso, de alguna manera, ya esta preocupando demasiado a los empresarios, tomando en cuenta que contra ellos se han dado diversas manifestaciones de repudio por parte del candidato de Morena, lo que significa que pudieran entrar en serias dificultades para cuando tengan que tratar con él o con los funcionarios que nombre.
De ahí que al momento, los empresarios organizados, no tengan una relación firme y satisfactoria con López Obrador, sobre todo, que les garantice que habrá acuerdos para el bien del país, ya que desde ahora, el candidato de Morena, los ha tratado con la punta del pie, aún cuando todavía no sabe si en verdad los ciudadanos mexicanos, lo prefieren. Desde hace tiempo, se han conocido acciones empresariales en contra López Obrador, pues han visto que difícilmente podrían entrar en negociaciones, de tal manera, que desde ahora, han emprendido en todo el territorio nacional, una serie de acciones que tienden, necesariamente, a bajar la soberbia del candidato que todavía no es Presidente y ya dicta resoluciones en contra de todo aquello que considera mal para el país.
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López Obrador, dice mucha gente, que podría ser el enterrador de una verdadera democracia, cuando este en el poder, porque no admitirá opinión de nadie y menos sí ésta es en contra de su propio sistema político, que poco a poco irá imponiendo, de tal manera, que su gobierno se prolongaría por más de veinte años, considerando las condiciones en que se mueve, ya que utilizará todo el poder concentrado en su persona para acabar con todos los que opinen en contrario, como ahora se esta viendo directamente con los empresarios, quienes se defienden en el sentido de que sus expresiones, aún en contra del mismo candidato en cuestión, forman parte de una libre expresión, es decir, que no se comete ningún delito con informar a la clase trabajadora de todas las empresas, acerca del personaje que quiere ser Presidente, pues solo eso se hace, es decir, buscar que sus trabajadores, que son millones, reflexionen más el voto y que sepan a quien escoger verdaderamente para seguir manteniendo las fuentes de trabajo que necesita la gente para seguir viviendo dignamente.
Pero esa es una gran tarea, así lo han considerado todos los empresarios organizados del país, porque faltan unos cuantos días para las elecciones y se percibe que en el ambiente político hay una gran disposición para votar a favor de López Obrador, pues la gente, dicen los empresarios, quieren un cambio en el gobierno, pero ese cambio debe ser considerado dentro de la reflexión y no dejarse llevar, solamente, por las promesas de los candidatos, pues las mismas pueden o no, ser verdaderos compromisos.
El asunto esta caliente y en los recientes días se ha incrementado esta preocupación del sector empresarial que por primera vez, le ha entrado de lleno a la cuestión política, pues independientemente de que digan que se trata de un ejercicio de libre expresión, la verdad de las cosas es que están haciendo política al promover la reflexión electoral entre toda la base trabajadora del país, de la cual, el sector empresarial, tiene la mayoría.
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Y COMO YA DECIAMOS en algunas ocasiones y en este mismo espacio, resulta que los candidatos a la gubernatura de Veracruz, se han emparejado en la preferencia electoral, y por pequeños puntitos, el candidato de la coalición Por un Veracruz, mejor, se ha colado al segundo lugar para poder disputar el triunfo electoral con el Partido del Movimiento de Regeneración Nacional, que diga lo que se diga, ha tomado la delantera como efecto, principalmente, de las propias actividades del candidato a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, que dicho sea de paso, todo indica que este día estará de nuevo en tierras veracruzanos, para cerrar, propiamente, su campaña política, según se ha difundido en los últimos momentos.
Dependerá del próximo debate, que Cuitláhuac García, mantenga esta delantera, porque es posible que después de la visita del candidato presidencial de Morena, sus bonos comiencen a bajar considerablemente, ya que la mayoría de los veracruzanos, esta de acuerdo en que falta la experiencia para gobernar al Estado de Veracruz. Esa es una gran verdad, pero tampoco se le puede negar que pueda hacer bien su trabajo, pues los mismos veracruzanos, aseguran que con que cumpla con llevar una administración honesta y transparente, será suficiente para que lo acepten durante todo el sexenio que le tocaría gobernar a la entidad veracruzana.
Sea como sea, hasta el momento, se tiene la versión de que hay un empate técnico entre las dos fuerzas políticas de Morena y el PRI, quienes a pesar del desgaste que ha tenido, siguen siendo una buena propuesta con su candidato Pepe Yunes.
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Y EN CONTRA DE QUIENES afirman que nuevamente el fantasma del abstencionismo, se presentará en estas elecciones del primero de julio, la verdad de las cosas, es que se podría tener una verdadera sorpresa, cuando se vea desfilar a gran parte de la mayoría ciudadana en las urnas electorales, pues hay la percepción, hasta este momento, de que la gente se encuentra sumamente interesada en este proceso electoral, primero, porque de alguna manera, la publicidad política los esta convenciendo de asistir a las casillas electorales y luego, porque ahora sí se nota un profundo deseo de cumplir con este compromiso ciudadano.
Así es que por primera ocasión, podría darse el caso de que se venciera al abstencionismo, cuando menos en mayor porcentaje que antes, cuando poco se daba el interés político y el cumplimiento de una obligación ciudadana, aparte, muy aparte, de saber, de la misma manera, que se estaría ejerciendo un verdadero derecho al elegir al candidato que más quieran o mejor les haya parecido en sus propuestas de gobierno.
Si esto sucede realmente, se estaría concretando las aspiraciones del pueblo en general, de practicar una verdadera democracia, es decir, avanzando en este propósito que ha sido solamente una especie de utopía, como proyección humana de un mundo ideal.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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