El maestro Aureliano Hernández Palacios, destacado jurista veracruzano, fue posiblemente de los últimos catedráticos de la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana que aceptó compartir sus conocimientos con los jóvenes universitarios por invitación expresa de autoridades de la UV, y que por el hecho de recibir la invitación consideró una distinción a su persona y aceptó sin percibir sueldo alguno; lo más importante para él era que en su curriculum se mencionara que había sido maestro de la Facultad de Derecho.
Originario de Villa de Tequila, Veracruz, el maestro ingresó a la Academia como miembro correspondiente el 14 de octubre de 1966. Realizó su licenciatura y maestría en derecho y el doctorado en ciencias penales en la Universidad Veracruzana (UV). Asimismo, fue profesor normalista, profesor y director de la Facultad de Derecho de la UV, rector de la UV, juez municipal, juez de primera instancia, magistrado y presidente del Tribunal Superior de Justicia, jefe del Departamento Jurídico de la Unidad de Servicios Coordinados de Educación de la SEP. Además, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias Penales, de la Academia Nacional de Geografía, Historia y Estadística, del Seminario de Cultura, de la Sociedad Mexicana de Criminología y del Ateneo Veracruzano.
Entre muchos reconocimientos que obtuvo está la Medalla Enrique C. Rébsamen, la Medalla al Mérito Docente y el doctorado Honoris Causa de la UV; también, la Medalla Alfonso Quiroz Cuarón 1985 de la Sociedad Mexicana de Criminología.
Fue autor de obras como Polvos del camino I (1976), Polvos del camino II (1988), A través del tiempo (1992), Homenaje al ilustre escritor Cayetano Rodríguez Beltrán en el primer centenario de su nacimiento (discurso de ingreso a la Academia de la Lengua, 1967), Memorias: Jalapa de mis recuerdos (1986), Guarino (1992), Voces de angustia (1946), Canciones ingenuas y otros poemas (1956) y Antología poética (1976).
Tuvimos el privilegio de coincidir en la Universidad Veracruzana, él como director del Área de Humanidades y un servidor como empleado del departamento de Prensa. Y en las pláticas que eventualmente sostuvimos, nos comentó con orgullo sus inicios dentro de la academia lo que ocurría en otras carreras; por ejemplo, en Medicina los más destacados médicos impartían cátedra sin cobrar, en Arquitectura lo hacían los mejores arquitectos y así en todas las carreras que ofrecía nuestra Casa de Estudios, el compromiso era compartir con las nuevas generaciones los conocimientos y de esa manera contribuir a la formación de nuevos cuadros.
En la Universidad se actuaba con las formalidades necesarias que daban a cada ceremonia la importancia que tenía; por ejemplo, los exámenes profesionales de los aspirantes a obtener sus títulos como abogados, se hacían en la sala de acuerdos del Tribunal Superior de Justicia, los sinodales y el alumno se presentaban de toga y birrete y en el lunario permanecían los familiares y compañeros del examinado. Los maestros sometían a un riguroso examen al aspirante y hasta que los sinodales agotaban sus dudas concluía le ceremonia. Tras un receso, el maestro titular daba a conocer el resultado de sus apreciaciones y generalmente se aprobaba al alumno que pasaba a formar parte de la distinguida comunidad de abogados, todos ellos respetables por sus conocimientos.
Obviamente, muchos no darán crédito a lo que estamos diciendo por los alarmantes niveles de descomposición en que entraron las universidades del país, donde se perdió el valor que tiene impartir cátedra y contribuir con eso a formar a los nuevos profesionales; tratar de involucrarlos, desde su formación, con la sociedad a la que se incorporaría con un título académico en la mano que les daba un lugar especial. Hoy la mayor parte de los maestros universitarios están ahí por la necesidad de un empleo, terminan una carrera y por sus deficiencias no se pueden incorporar al mercado laboral y se quedan dando clases, mal preparando a las nuevas generaciones; los cargos directivos en el organigrama universitario se ganan por grillas, ya no por conocimientos científicos; las plazas de investigadores se pelean o trafican, porque se trata de jubilaciones con jugosos salarios a cambio de nada, y la difusión de la cultura se va perdiendo entre marañas burocráticas, grilla e ignorancia de las autoridades.
¿Será que todos esos privilegios que han ganado a lo largo del tiempo, maestros, funcionarios, investigadores y promotores de la cultura, los pierdan y se queden devengando solo lo que merecen a cambio de sus chambas?
En tiempos de cambios como los que estamos viviendo en todo el país, sería necesario que el nuevo gobierno le diera una revisadita a estos asuntos que hoy planteamos, sin que ello vaya en detrimento de la autonomía de nuestras Casas de Estudios, sino únicamente por recuperar la excelencia y dar un fin correcto a los recursos que se entregan a las universidades, que al final salen de lo que pagamos como impuestos.
Los Yunes cargan hasta con el balneario
El rumor que circulaba en los municipios de Boca del Río y Veracruz en el sentido de que el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares entregará inmuebles a los municipios mencionados en manos de sus hijos, lo confirmó él este lunes cuando dijo a los representantes de los medios de comunicación: “los inmuebles que los ayuntamientos han solicitado que les sean donados, serán entregados antes de terminar la actual administración estatal”, o sea, la suya.
Dijo que la condición será que los inmuebles ya sean administrados por los municipios, tal como sucede con Veracruz y Boca del Río. “Los recintos que soliciten los ayuntamientos, que los estén administrando ya, se los vamos a dar; no tiene ningún sentido que nosotros seamos propietarios de un recinto y que lo administre otra entidad”. Y, claro, ya veremos el tratamiento que le estarán dando a estos inmuebles que se pondrán en manos de patronatos a cuya cabeza estarán prestanombres de la familia Yunes. Negocios son negocios y estos creen que siguen en el poder.
Pero, además, como si le creyéramos, Yunes Linares dijo que es necesario autorizar la donación ya que de todas maneras la administración la está realizando el municipio y no el Gobierno del Estado que es legalmente el propietario. Según la información que han proporcionado los ayuntamientos, el de Veracruz solicitó la donación del Auditorio Benito Juárez, mientras que Boca del Río pidió la Casa-Museo Agustín Lara y el Balneario Mocambo”. Así termina esta otra historia de abuso, de tráfico de poder, de despojo de nuestros bienes por parte de quienes detentan el poder… Insistimos, qué bueno que fue de dos años este desastre de gobierno.
A renovar credenciales de elector
Se nos informa que el 1 de enero de 2019 perderán vigencia todas las credenciales para votar con fotografía con terminación 18. Por ello, el Instituto Nacional Electoral ha iniciado una campaña de renovación de estas micas, consideradas como uno de los documentos de identificación oficial más importantes.
Josué Cervantes Martínez, vocal ejecutivo de la Junta Local del INE en la entidad, señaló que todas las credenciales de elector en las que no aparezca fecha de vigencia en la parte inferior del anverso dejarán de ser útiles para votar y, también, como identificación oficial, debido a que cumplen 10 años de vida. Al mismo tiempo, hizo un llamado a aquellos ciudadanos que posean este tipo de credenciales para que acudan cuanto antes a cualquier módulo del Registro Federal de Electores a solicitar su renovación y obtener, así, una nueva mica electoral con vigencia.
Los ciudadanos que se encuentren en este caso deberán llevar su acta de nacimiento, un comprobante de su domicilio con menos de 3 meses de antigüedad, su credencial que está por vencer o algún medio de identificación con fotografía para proceder a realizar el trámite correspondiente. De esta manera, quienes estén en el supuesto de vencimiento podrán acudir a cualquiera de los 72 módulos distribuidos en el territorio veracruzano.
REFLEXIÓN
Nada despreciable la advertencia que hace el profesor-Investigador de la División de Administración Pública del Centro de Investigación y Docencia Económicas, A.C. (CIDE), Mauricio Merino Huerta, en el sentido de que las viejas elites que en su momento perdieron el poder, ahora van de regreso al poder. Mucho cuidado con la reconstrucción de un aparato político que combatiendo al PRI acabe siendo una gota de agua con ese PRI al que se le combatió. Hay un riesgo inminente de que eso pueda suceder y tenemos que estar muy alertas. Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx formatosiete@gmail.com www.formato7.com/columnistas |